“El costo estimado del crimen alcanza 1,3% del Producto Interno Bruto (PIB), cifra mayor a lo que crecimos en todo 2013 (1,1% del PIB)", informó la Confederación Patronal de la República Mexicana.
Excelsior.com.mx El costo que provoca la delincuencia en el país superó el crecimiento económico del año pasado reveló Juan Pablo Castañón Castañón, presidente de la Confederación Patronal de la República Mexicana (Coparmex).
“El costo estimado del crimen alcanza 1,3% del Producto Interno Bruto (PIB), cifra mayor a lo que crecimos en todo 2013 (1,1% del PIB).
Se trata de 215 mil millones de pesos (US$16.200M) que pudieron haberse destinado a solventar necesidades urgentes como el combate a la pobreza, la inversión en infraestructura o el impulso a la calidad educativa”, indicó en su mensaje semanal.
De acuerdo con el dirigente, el efecto positivo de las reformas puede diluirse si no se logra la plena recuperación y restauración del Estado de derecho, ya que existen “territorios sin ley donde prevalecen altos índices de secuestro y extorsión, economías ilegales y criminales donde la ausencia del Estado de derecho es absoluta”.
Consideró que el tema no es menor dado que cuatro de cada 10 empresas sufre algún tipo de delito al año, mientras que uno de cada tres hogares mexicanos tiene al menos una víctima de la delincuencia.
Razón por la que consideró urgente iniciar un proceso integral de reconstrucción económica y fortalecimiento institucional; no sólo en las regiones donde impera la violencia, sino en todo el país.
El representante del sector patronal hizo un reconocimiento a las Fuerzas Armadas y al Ejecutivo federal “por los recientes éxitos obtenidos en la lucha contra el crimen organizado”, pero demandó avanzar en una estrategia integral para disminuir la inseguridad.
“Debemos potenciar el fortalecimiento institucional que requiere una estrategia integral de seguridad. Acelerando la implementación del sistema penal acusatorio, con juicios orales en todo el país, y avanzando en la reconstrucción del sistema de impartición de justicia, desde la procuración y la integración de los expedientes con Ministerios Públicos más fuertes, hasta la reinserción social con opciones de desarrollo para la persona.”
Calculan pérdidas por más de US$11.000 millones. La inseguridad le cuesta a México entre 8% y 15% del Producto Interno Bruto (PIB), tanto en impactos directos como por el miedo a ser víctima debido a que las instituciones de justicia son “profundamente disfuncionales”.
Alejandro Hope, director de seguridad del Instituto Mexicano para la Competitividad (IMCO), explicó que cifras del Instituto Nacional de Estadística y Geografía al cierre de 2013 revelan que las pérdidas económicas derivadas de los delitos alcanzó poco más de 152 mil millones de pesos (US$11.467,8 millones), a lo que se suman 7 mil 740 millones (US$583,9 millones) en daños en salud y más de 55 mil millones (US$4.149 millones) en medidas preventivas.
“Esto representa en total 1,4% del PIB, pero es apenas la punta del iceberg porque piensen en todo lo que no hacemos para protegernos”, advirtió al participar en una mesa de análisis organizada por el Observatorio México ¿Cómo vamos?
Hay personas que dejan de realizar actividades económicas para evitar ser víctimas del delito como salir de noche, llevar dinero en efectivo, tomar taxi, viajar por carretera o frecuentar centros comerciales por sólo nombrar algunos, que significan un impacto para la economía difícil de contabilizar.
Hope precisó que tomando en cuenta la pérdida de bienestar, tanto directa como indirecta, el costo de la inseguridad aumenta en un rango de entre 8% y 15% del PIB cada año, a lo que todavía hay que sumar las inversiones que dejan de llegar al país por este fenómeno.
En su opinión, el problema de la inseguridad está en el hecho de que las instituciones de justicia que tiene México son “disfuncionales” y “hacen todo menos impartir justicia”.
Muestra de ello es que el número de homicidios en el país se ubicó por encima del promedio de la Organización para la Cooperación y Desarrollo Económicos (OCDE), el 92% de los delitos no se denuncian, el 40% de los reos no tienen una condena y el ingreso promedio de los policías es muy bajo.
Isaac Katz, profesor de economía del Instituto Tecnológico Autónomo de México, coincidió al asegurar que el país no tiene un verdadero Estado de derecho porque pareciera que el “deporte nacional es violar las leyes”.
Esto se refleja en que existe una impunidad de 97% únicamente en los delitos de fuero común, lo que provoca que haya inseguridad judicial y, en consecuencia, reduce las inversiones que entran al país.
“Hay una agenda que está muy clara para revertir esto y en primera instancia se necesita acelerar la reforma al sistema de justicia penal que inició en 2008”, agregó el analista del IMCO.
Si bien dicha reforma tiene que estar terminada en 2016, varios de los estados están rezagados en su implementación y otros que van más adelantados tienen cambios que no son óptimos.
Debe concretarse una reforma al sistema policial que genere mejores sueldos, ya que 9 mil pesos en promedio al mes es insuficiente para los peligros que se enfrentan, y que dé una mayor certeza a la población.
También recomendó a las autoridades aplicar una reforma penitenciaria porque México es el octavo país en el mundo en número de reos que no está logrando rehabilitar y que castiga a la pobreza.