Este es su ritmo de expansión más lento desde noviembre del 2009 - excluyendo el volátil mes de febrero del año pasado cuando el período festivo del Año Nuevo Lunar interrumpió la actividad.
Pekín. Las exportaciones e importaciones de China crecieron a su menor ritmo en más de dos años en diciembre, ante una caída de la demanda interna y externa, mostraron datos publicados este martes, reforzando la necesidad de que Pekín flexibilice más su política monetaria.
Las exportaciones anuales crecieron un 13,4% en diciembre, justo por debajo de la previsión del 13,5% obtenida en un sondeo de Reuters a 23 economistas.
Este es su ritmo de expansión más lento desde noviembre del 2009 - excluyendo el volátil mes de febrero del año pasado cuando el período festivo del Año Nuevo Lunar interrumpió la actividad.
El crecimiento de las importaciones se desaceleró a un mínimo en 26 meses de un 11,8%, muy por debajo de la previsión de un 17%.
"La principal decepción es con las importaciones, que muestran un número mucho más débil en comparación con noviembre y están muy por debajo del consenso", dijo Kevin Lai, economista de Daiwa Capital Markets, en Hong Kong.
"Eso significa que el alza en noviembre fue temporal y que la economía doméstica se está desacelerando fuertemente. China tendrá que continuar relajando su política para proteger a la demanda interna", agregó.
Los datos comerciales de diciembre son un vínculo clave de una serie de indicadores sobre la actividad económica que China divulgará durante las próximas dos semanas, incluido el Producto Interno Bruto (PIB) del cuarto trimestre, que mostraría que la segunda mayor economía mundial vivió su peor trimestre en dos años y medio.
Los mercados financieros exhibían una escasa reacción inmediata con el índice compuesto de Shanghái subiendo cerca de un 1,5% a las 0325 GMT y el yuan fortaleciéndose a 6,3122 unidades por dólar.
A pesar de la desaceleración de las tasas de crecimiento, el valor de las importaciones y exportaciones de China, que alcanzó cifras récord en noviembre, habría terminado el 2011 en, o cerca de, máximos históricos.
Sin embargo, los flojos datos comerciales son incómodos para Pekín, debido a que el sector exportador es el que genera la mayor cantidad de empleos en China, aún cuando su producción representó apenas cerca de un 7% del PIB del país en el 2010.
Para contrarrestar una débil demanda de Estados Unidos y Europa, los dos principales mercados para las exportaciones de China, Pekín disminuyó los requisitos de reserva para los bancos en 50 puntos básicos en noviembre, la primera de tales reducciones en tres años para fomentar el aumento de las líneas de crédito corporativas.
La mayoría de los analistas anticipa nuevas medidas de flexibilización en el futuro.