El presidente liberal Mauricio Macri inició una batalla para reducir los costos que mantienen la balanza comercial del país en un nivel deficitario desde diciembre del 2016. Entre otros aspectos, el Gobierno buscará bajar impuestos de las empresas y flexibilizar las condiciones de trabajo de algunos rubros.
Buenos Aires. Argentina seguirá con déficit comercial si el Gobierno no reduce impuestos o permite una fuerte caída del peso para disminuir los altos costos en dólares que tienen las empresas locales, señalaron expertos y empresarios a Reuters.
El presidente liberal Mauricio Macri inició una batalla para reducir los costos que mantienen la balanza comercial del país en un nivel deficitario desde diciembre del 2016. Entre otros aspectos, el Gobierno buscará bajar impuestos de las empresas y flexibilizar las condiciones de trabajo de algunos rubros.
Para el sector de los envases "hoy Argentina es un 20% más cara que Europa, un 15% más cara que Estados Unidos y un 5% más cara que Brasil", dijo a Reuters Martín Guaita, presidente ejecutivo de Envases del Plata, que posee dos plantas en Argentina y una en Brasil.
La balanza comercial de Argentina acumula un saldo negativo de US$4.498 millones en el período enero-agosto 2017, frente a un resultado positivo de US$2.124 millones en 2016 y una cifra negativa de US$2.969 millones en 2015.
Según la consultora Ecolatina, "el tipo de cambio real multilateral cayó cerca de 11% interanual en el segundo trimestre, alentando la compra de bienes de consumo, autos o el turismo en el extranjero. Además, la falta de competitividad cambiaria desincentiva las exportaciones".
El proyecto de presupuesto oficial para 2018 prevé que el rojo del comercio exterior del país sudamericano se profundizará respecto a este año debido a un aumento del 6,8% de las importaciones y de sólo un 5,6% para las exportaciones.
El subsecretario de Industria, Martín Etchegoyen, dijo a periodistas que el Gobierno planea bajar los pagos de seguridad social que realizan las empresas de los sectores del calzado y el textil para reducir sus costos.
Además, el Gobierno enviará al Congreso a fin de año un proyecto de reforma fiscal para disminuir la presión impositiva sobre las empresas.
Luego de que Macri asumió la presidencia en diciembre de 2015 Argentina eliminó controles cambiarios e impuestos a las exportaciones de materias primas, al tiempo que levantó restricciones a importaciones con la promesa de reactivar la economía y reanimar la inversión extranjera.
Desde entonces, algunos empresarios se han quejado de que no pueden competir con los bienes importados.
El peso argentino, que fue devaluado un 28 por ciento tras la asunción de Macri, acumula en lo que va del 2017 una caída del 9,5%. Por su parte la inflación, que en 2016 alcanzó al 40,9%, promedia niveles del 20% para finales de año, señalan analistas.
"El tipo de cambio es una variable importante, aunque más importante que eso es que también cambiemos el sistema impositivo", sostuvo Teddy Karagozian, presidente ejecutivo de la textil TN&Platex durante una jornada organizada por la Unión de Aseguradoras de Riesgos del Trabajo.