Los elevados déficit de cuenta corriente y fiscales son algunos de los principales desafíos que enfrenta la presidenta Dilma Rousseff.
El déficit de cuenta corriente de Brasil se amplió en enero frente al mes previo a su segunda mayor alza mensual mientras las exportaciones continúan disminuyendo, mostraron este martes datos del banco central.
Brasil registró un déficit de cuenta corriente de US$10.654 millones en enero, por debajo de las expectativas de mercado de US$10.990 millones, pero encima de los US$10.317 millones registrados en diciembre.
La brecha externa de Brasil se amplió en forma aguda debido a una caída en el valor de exportaciones cruciales como mineral de hierro y soja, lo cual llevó a que la balanza comercial registrara en 2014 un déficit por primera vez en 14 años.
Los elevados déficit de cuenta corriente y fiscales son algunos de los principales desafíos que enfrenta la presidenta Dilma Rousseff, mientras busca recuperar la confianza de los inversores en un intento de sacar a la economía de cuatro años de desaceleración.
El recientemente designado ministro de Hacienda Joaquim Levy dijo el lunes que el déficit externo no está aún en niveles "críticos" debido a que los niveles de inversión extranjera continúan cubriendo la mayor parte de esta brecha.
En enero, el país registró flujos de inversión extranjera directa de US$3.968 millones, por encima de las expectativas de mercado de US$3.300 millones.
Los pronósticos del banco central para el déficit de cuenta corriente y la inversión extranjera directa en el 2015 son de US$83.500 millones y US$65.000 millones, respectivamente.