Los datos divulgados por el Ministerio de Economía y Finanzas muestran que en los 12 meses finalizados en junio, los ingresos del Estado se redujeron en una décima de punto porcentual debido a que "el Resultado Primario Corriente de las Empresas Públicas se deterioró levemente".
El Observador de Uruguay. El rojo de las cuentas públicas se mantuvo en junio en 4% del PIB, debido a un deterioro de las finanzas de las empresas públicas y un aumento de los intereses de deuda que compensaron el menor gasto de ANCAP en acumulación de existencias de petróleo.
A pesar de la insistencia del equipo económico en reducir las vulnerabilidades finanzas, el déficit fiscal afianzó en junio registros altos desde el punto de vista histórico.
Hay que remontarse a 2003, a la salida de la peor crisis financiera de la historia uruguaya, para encontrar dos registros mensuales consecutivos de 4%.
Los datos divulgados este martes por el Ministerio de Economía y Finanzas (MEF) muestran que en los 12 meses finalizados en junio, los ingresos del Estado se redujeron en una décima de punto porcentual debido a que "el Resultado Primario Corriente de las Empresas Públicas se deterioró levemente".
Los intereses de deuda, por su parte, aumentaron en 0,2 puntos porcentuales debido tanto al costo de la deuda asumida por el Gobierno como del Banco Central.
En la exposición de motivos de la Rendición de Cuentas a estudio en el Parlamento, las autoridades económicas establecieron una meta de déficit fiscal equivalente a 3,3% del PIB para el cierre de este año.
El objetivo es reducir el indicador a 2,8% en 2019 y 2,5% en el primer año de la próxima administración.
Sin embargo, los analistas privados no confían en que el gobierno alcanzará esos objetivos.
Por el contrario, la mediana de expertos que contestaron en junio la Encuesta de Expectativas Económicas de El Observador preveían un resultado fiscal de 3,6% tanto para este como para el próximo año.