La región ha hecho esfuerzos por alcanzar la integración, pero la ideología se ha presentado como una barrera que debe ser superada, dijo el jefe para América Latina de la firma, Carlos A. Haehnel.
Panamá. Latinoamérica debe concretar a mediano plazo una articulación política, económica y social por encima de las ideologías, si pretende mantener el inédito crecimiento de la última década que la ha colocado como la cuarta región más grande del mundo en términos de producto interno bruto (PIB).
La región ha hecho esfuerzos por alcanzar la integración, pero la ideología se ha presentado como una barrera que debe ser superada y más ahora, en un mundo que camina a paso acelerado hacia la organización en bloques cada vez más grandes, argumentó el jefe de América Latina de la firma internacional de consultoría Deloitte, Carlos A. Haehnel.
En materia de integración "los tiempos se han ido acelerando, me parece que dentro de los próximos 5 años deberíamos tener resultados muy importantes" en materia de articulación de las políticas, alertó el alto ejecutivo en una entrevista con Efe en la capital panameña, en el marco del Foro Económico Mundial Latinoamérica que se instalará mañana.
Resaltó que América Latina representa actualmente el 8,6% del PIB mundial, solo superada por Norteamérica con el 21%; la Unión Europea (UE) con el 18,7%, y China con el 15,4%.
Ese crecimiento en términos del PIB se ha concretado sobre todo en la última década gracias no solo a los espectaculares precios de los productos agropecuarios y mineros, la base de la economía regional, sino también a la "estabilidad política" que se ha traducido en una "estabilidad económica", explicó el alto ejecutivo.
"Si se mira, salvo muy poquitas excepciones, se va a encontrar una Latinoamérica institucionalizada, con sucesiones de gobiernos sin traumas", que han permitido "una continuidad en lo sustantivo en cuanto a políticas económicas y eso ha creado un círculo virtuoso de inversión, crecimiento y desarrollo", afirmó Haehnel.
La expansión de la economía también se ha reflejado en el aspecto social, ya que "absolutamente todos los países de Latinoamérica, si se compara el 2002 con el 2011, han reducido el porcentaje de personas que están en la pobreza" en diferentes proporciones.
Haehnel destacó que Latinoamérica no es la más pobre pero sí es la más desigual del mundo, y que hay un esfuerzo por lograr la reducción de la pobreza en la región y de distribuir mejor la riqueza.
Pero América Latina, con más de 500 millones de habitantes, el 27,9% pobres según datos de la Comisión Económica para América Latina y el Caribe (Cepal), aún "no ha logrado articularse en lo político, social y económico", lo que supone un reto importante para mantener los éxitos alcanzados, alertó el experto.
"Tenemos que trabajar muy activamente en esto, si no, la fuerza de un territorio enorme como es Latinoamérica, hoy en día con una participación económica relevante en este 8,6% del PIB mundial, se va a ir diluyendo y nos vamos a quedar, nuevamente, divididos, ante un mundo que empieza a aglutinarse cada vez más", afirmó Haehnel.
Los esfuerzos en ese sentido existe, con bloques como el Mercado Común del Sur (Mercosur) y la naciente Alianza del Pacífico, entre otros, pero el escollo a superar son las ideologías, a juicio del experto.
"No podemos tener bloques diferentes como consecuencia sobre todo de posiciones ideológicas. Ya las barreras ideológicas van cayendo en el mundo y no podemos seguir estando divididos por ideologías, hay que estar unidos por la necesidad de luchar por el bienestar de nuestros pueblos", dijo.
Señaló el papel "un tanto de ausente" que ha jugado en los últimos años Brasil, la mayor economía de la región, y opinó que debería asumir su rol protagónico de liderazgo sin que ello signifique de "supremacía"..
"Tenemos que decirle 'Brasil bienvenido, incorpórate'. México tiene también que ser parte de esta región, sin perjuicio de tener sus acuerdos con Estados Unidos. Los latinoamericanos tenemos que entender que juntos somos más, que podemos más y que, en consecuencia, podemos generar condiciones de desarrollo social, económico y políticos mucho más importantes", añadió.