Las personas entre 18 y 29 años de edad son las más afectadas por los vaivenes de la economía, tanto en sus períodos de contracción como en los de crecimiento.
Buenos Aires. Un análisis de Clarín de los antecedentes oficiales, concluyó que los jóvenes argentinos son los más afectados por el desempleo, la informalidad, la falta de oportunidades y de protección social del mercado laboral del país.
De los 1.555.900 desocupados consignados por el Instituto Nacional de Estadísticas y Censos (Indec), 797.400 tienen entre 18 y 29 años, de los cuales sólo el 3,7% –29.346 personas– percibía el seguro de desempleo de menos de $400 mensuales, equivalentes a US$101.
De los 4.293.800 jóvenes que están ocupados, 2.050.000 cuentan con aportes previsionales al sistema nacional como asalariados, autónomos, monotributistas o servicio doméstico. El resto se mantiene en la informalidad.
Según especialistas citados por el medio argentino, en los ciclos recesivos los jóvenes son más perjudicados por los despidos y la falta de empleo que los adultos; pero en las etapas expansivas de la economía son relegados o empleados “en negro” .
“En este caso el argumento sería la falta de calificación o la ‘rigidez’ de la legislación laboral que obligaría a formalizar a los ingresantes al mercado laboral a un costo que no tendría correlato en la productividad juvenil”, planteó Clarín.