En diciembre del 2014, el 59,86% de la población de 15 años y más en el país era económicamente activa, esta cifra es menor a la observada en el mismo mes de 2013, cuando se ubicó en 61,08%, según el Inegi.

Durante diciembre del 2014, la tasa de desocupación (TD) a nivel nacional, respecto a la Población Económicamente Activa (PEA), fue de 4,38%, el nivel más bajo desde octubre del 2008, cuando se ubicó en 4,03%, de acuerdo con datos desestacionalizados de la Encuesta Nacional de Ocupación y Empleo (ENOE) del Instituto Nacional de Estadística y Geografía (INEGI), que en virtud de la reciente reforma constitucional que elevó la edad legal mínima para trabajar de los 14 a los 15 años, sus resultados desde el mes pasado ya contemplan el universo de personas de 15 años de edad en adelante.

Esta variable macroeconómica dibujó una tendencia descendente desde agosto del año pasado, cuya lectura correspondería a una ligera recuperación de la actividad económica, situación que generaría más empleos.

Por género, la TD en los hombres disminuyó de 4,79 a 4,36% entre diciembre del 2013 y el mismo periodo del 2014; la de las mujeres 5,12 a 4,39% en igual lapso, según series desestacionalizadas.

La tasa de informalidad laboral 1 (TIL1), que se refiere a la suma, sin duplicar, de los que son laboralmente vulnerables por la naturaleza de la unidad económica para la que trabajan, con aquellos cuyo vínculo o dependencia laboral no es reconocido por su fuente de trabajo, se ubicó en 57,84% de la población ocupada en dicimebre pasado, que significó una reducción anual de 0,89 puntos porcentuales.

Mientras la tasa de ocupación en el sector informal 1 (TOSI1), que considera a todas las personas que trabajan para unidades económicas no agropecuarias operadas sin registros contables y que funcionan a partir de los recursos del hogar o de la persona que encabeza la actividad sin que se constituya como empresa, de modo que no tiene una situación identificable e independiente de ese hogar o de la persona que la dirige y que tiende a concretarse en una muy pequeña escala de operación, representó 27,92% de la población ocupada en el mes que se reporta; un año antes fue de 28,16%.

Con datos desestacionalizados, al interior de la PEA, los subocupados, que manifiestan un subuniverso de casos que declaró tener necesidad y disponibilidad para trabajar más horas, representaron 8,34% de la población ocupada; en comparación con diciembre del 2013, se exhibió un aumento de 0.14 puntos porcentuales.

Para el cierre del año pasado, la tasa neta de participación, ajustada por estacionalidad, se colocó en 59,65%, que se refiere a la población de 15 años y más en el país que es económicamente activa; esta cifra fue menor a la observada hace un año, cuando se ubicó en 60,94%.

Cifras originales. Bajo un esquema sin ajuste, en el último mes del 2014, 59,86% de la población de 15 años y más es económicamente activa (está ocupada o busca estarlo); el restante 40,14% se dedica al hogar, estudia, está jubilado o pensionado, tiene impedimentos personales o realiza otras actividades.

Así, la población ocupada alcanzó 96,24% de la PEA. De los ocupados, 67,4% opera como trabajador subordinado y remunerado ocupando una plaza o puesto de trabajo; 22,9% trabaja de manera independiente o por su cuenta sin contratar empleados; 5,6% se desempeña en los negocios o en las parcelas familiares, contribuyendo de manera directa a los procesos productivos, pero sin un acuerdo de remuneración monetaria; y 4,1% son patrones o empleadores.

A nivel urbano de alta densidad de población, conformado por 32 ciudades de más de 100.000 habitantes, el trabajo subordinado y remunerado constituyó 74,0% de la ocupación total; lo anterior figuró 6.6 puntos porcentuales más que la tasa nacional.

Por sector de actividad económica, la población mexicana ocupada se concentró, principalmente, en servicios (42,1% del total); comercio (19,7%); industria manufacturera (15,8%); actividades agropecuarias (13,4%), y construcción (7,6%).

La tasa de desocupación nacional fue de 3,76% de la PEA en diciembre del 2014, cuando hace un año se estacionó en 4,27%; en este periodo, en los hombres se redujo de 4,25 a 3,81%, y en las mujeres 4,29 a 3.67%.

De este mercado desocupado, 21,3% no contaba con estudios completos de secundaria, mientras 78,7% ostentaba mayor nivel de instrucción.

La desocupación en el conjunto de 32 principales áreas urbanas del país, significó 4.35% de la PEA, un descenso anual de 0.85 puntos porcentuales.

Por entidad federativa, los mayores coeficientes de desempleados se registraron en Tabasco (6,47%), Baja California Sur (6,29%) y Distrito Federal (5,93%).

De los subocupados, éstos representaron 7.6% de la población ocupada, similar a la mostrada en diciembre del 2013 (7,5%).

Para Joan Enric Domene, analista de Invex, el dato de diciembre mostró un dinamismo mejor al esperado, corroborado por los datos ajustados por estacionalidad, aunque destacó el fenómeno estacional de la contratación durante el periodo de navidad que tradicionalmente reduce la tasa de desempleo.

Además, los subíndices de informalidad dentro de la población ocupada han expuesto una evolución positiva en la mayor parte del año, que sugiere una transición al mercado laboral formal.

De acuerdo con los indicadores del Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS), el especialista aseveró que esta transición está liderada por la inserción laboral en el sector industrial. En el año se crearon 714,526 empleos formales, gracias a la construcción.

Para el 2015, pronosticó una tasa promedio de 4.7% debido a que el mejor dinamismo de la economía generará mayor creación de empleo y, a su vez, consideró que este buen ritmo se mantendrá durante este año por el mejor comportamiento de la industria y de los servicios. En consecuencia, espera un aumento de la masa salarial que contribuya a la recuperación del consumo.