La presidenta hizo énfasis en que Brasil está bien preparado para enfrentar los retos financieros y sostuvo que durante su gobierno mantiene un "compromiso innegociable" con la estabilidad económica.
Sao Paulo. Brasil vive actualmente la mejor década de su historia reciente, dijo la presidenta Dilma Rousseff durante un acto para conmemorar los 10 años del Partido de los Trabajadores (PT) en el gobierno federal, donde reiteró su compromiso con la estabilidad económica del país.
Ante una audiencia de militantes del PT este miércoles en la noche y con un discurso que pareció ser el lanzamiento de la plataforma para su candidatura a la reelección, la mandataria alabó al ex presidente Luiz Inácio Lula da Silva y que dijo era el "gran líder" de la década.
La presidenta hizo énfasis en que Brasil está bien preparado para enfrentar los retos financieros y sostuvo que durante su gobierno mantiene un "compromiso innegociable" con la estabilidad económica.
"Nosotros, los brasileños, sabemos cuál es la mejor década de nuestra historia reciente. Esa década es la década que comenzamos a conmemorar ahora", dijo la presidenta durante el evento en Sao Paulo. "Es la década de la reconstrucción nacional (...) es la década de nuestra autoestima".
"Nuestros fundamentos son cada vez más sólidos. Nuestro Gobierno (...) está más que preparado para enfrentar los desafíos. La estabilidad es uno de nuestros compromisos innegociables y sabremos mantenerlo. Que nadie dude de nuestra capacidad para mantener la estabilidad macroeconómica de nuestro país", aseguró.
Rousseff enumeró los logros de su Gobierno, como la ampliación de los programas sociales, la reducción de las tarifas de la electricidad y de las tasas de interés. También atacó a quienes, según ella, esparcieron a comienzos de año temores sobre un racionamiento de la energía eléctrica.
"Todo se disipó tal como surgió (...). Lo que brilla en el horizonte fue la mayor reducción de (las tarifas de) la energía de la historia", dijo Rousseff.
En enero, el gobierno anunció la reducción de las tarifas, en un 18% para los hogares y en un 32% para los usuarios de la industria, la agricultura, el comercio y los servicios.
Dentro de las prioridades para un eventual segundo mandato, la presidenta apuntó a la educación como una necesidad para que el país se convierta en una nación desarrollada y dijo que el PT y los partidos aliados tienen que estar preparados para los desafíos que vienen.
A poco más de un año de la elección presidencial, la presidenta saludó también a los militantes de su partido.
"Este país no elegiría a un trabajador (que fuera un) operario y a una mujer presidenta si no fuera por la combativa militancia del Partido de los Trabajadores", dijo.