"Hemos cerrado operaciones a 7,25 bolívares hoy. Las empresas no pueden parar su producción ni incumplir con el pago de sus deudas por la falta de dólares a 4,3 ó a 2,6 bolívares por dólar, dependiendo del rubro", dijo un operador.
Caracas. El tipo de cambio paralelo en Venezuela seguíaganando terreno el jueves y alcanzaba un nuevo máximo histórico de 7,25bolívares por dólar, impulsado por una ingente demanda de divisas yescasos suministros de dólares oficiales.
Algunos operadoresdescribieron el mercado como lento, pero otros aseguraron haberregistrado elevados requerimientos por parte de clientes corporativosque aún esperan autorizaciones gubernamentales para adquirir dólares alas tasas cambiarias oficiales, especialmente la de 4,3 bolívares pordólar.
"Hemos cerrado operaciones a 7,25 bolívares hoy. Lasempresas no pueden parar su producción ni incumplir con el pago de susdeudas por la falta de dólares a 4,3 ó a 2,6 bolívares por dólar,dependiendo del rubro", dijo un operador.
Otro afirmó que elnivel máximo al que había cerrado era de 7,19 bolívares/dólar. "Elmercado paralelo está en esos niveles", aseguró.
En el paísrige un férreo control de cambios que tiene dos tasas oficiales: una,de 2,6 bolívares por dólar para importaciones esenciales, y otra de 4,3bolívares por dólar para otra amplia gama de sectores.
Analistashan dicho que pese a que el Banco Central de Venezuela (BCV) ha vendidoeste año unos US$360 millones para suplir parte de la enormedemanda y contener el alza del mercado paralelo, aún persistenelementos que están impulsando ese tipo de cambio, que es referentepara las cuantiosas importaciones del país.
El BCV lanzó estejueves la novena emisión de bonos cambiarios por US$50 millones, a un plazo de 90 días y un rango de precios de 110-112 porciento que arroja un tipo de cambio implícito de los papeles de entre4,77 y 4,78 bolívares por dólar.
"Tenemos clientes que estánesperando por semanas sus autorizaciones para adquirir dólares a 4,3bolívares y no se los han aprobado. Al final tienen que cubrirse en elmercado paralelo y eso se traslada a los precios y de allí másinflación", dijo otro agente, quien sostuvo haber pactado transaccionesa 7,25 bolívares/dólar.
El impacto del dólar no oficial sobrelos precios ha sido un elemento clave por el cual la inflación enVenezuela sigue al galope. En 2009, cerró en 25% y en loque va del año alcanza 5,8%, con proyecciones que lasitúan por encima del 30% a finales del año.
Y pesea que fue el propio presidente Hugo Chávez quien aseguró este año quederrumbaría el dólar "especulativo", su tasa actual supera holgadamenteal 6,2 bolívares/dólar en que se encontraba cuando el Gobierno devaluóla moneda en enero y estableció un segundo tipo de cambio.
"ElBanco Central no puede él solo bajar el dólar con subastas esporádicasy de bajo monto. Debe haber una política coherente y articulada portodo el Gobierno y Petróleos de Venezuela (PDVSA), que es al final laempresa que aporta la mayor parte de las divisas al país", dijo unagente.
Acosado por una recesión económica y por problemasfiscales, Chávez tuvo que torcer su brazo y devaluar desde 2,15 a 2,6bolívares por dólar para bienes esenciales y estableció un "dólarpetrolero" de 4,3 por dólar para otros sectores, en el marco de uncontrol de cambios implantado en 2003.
En tanto, lasreservas internacionales del país se ubican en US$28.821 millones, US$7.009 millones por debajo del 2009, y de los cuales US$5.000millones han sido transferidos a un fondo estatal que el gobiernoafirma destina recursos a importantes proyectos nacionales.