La economía brasileña perdió 169.131 empleos netos en octubre, informó el viernes el Ministerio de Trabajo, por encima de los 95.602 puestos de trabajo perdidos en septiembre.
Brasilia. La pérdida de empleos en Brasil se aceleró en octubre a su ritmo más rápido en lo que va de año, mientras la crisis política y económica del país sigue deteriorándose.
La economía brasileña perdió 169.131 empleos netos en octubre, informó el viernes el Ministerio de Trabajo, por encima de los 95.602 puestos de trabajo perdidos en septiembre.
Se esperaba que las empresas brasileñas despidieran a 179.000 trabajadores el mes pasado, según un sondeo de Reuters.
Las compañías recortaron sus plantillas en todos los sectores empresariales y regiones. Firmas de manufacturas, construcción y servicios despidieron a unos 50.000 trabajadores en cada sector en octubre.
La profunda recesión de Brasil ya costó cerca de 1,4 millones de empleos en los últimos 12 años. Incluso los que lograron mantener su trabajo se sienten inseguros por el futuro, enviando las mediciones de confianza del consumidor a récords mínimos sucesivos.
Se espera que la economía brasileña se contraiga más del 3 por ciento este año y un 2 por ciento en 2016, en la que podría ser la recesión más larga desde la década de 1930.
La crisis, generada en parte por la preocupación de los mercados ante el estancamiento político en el Congreso, afectó a la popularidad de la presidenta, Dilma Rousseff. Los partidos opositores buscan someterla a un juicio político un año después de su reelección, mientras su índice de aprobación cae por debajo del 10 por ciento.
El estado norteño de Pará, rico en materias primas agrícolas y minerales, tuvo la mayor caída en empleo de un mes a otro, con un 1,15 por ciento, según datos del Ministerio de Trabajo. Se perdieron unos 95.000 puestos en la zona más poblada del país, los estados sureños de Sao Paulo, Río de Janeiro y Minas Gerais.