El indicador, que reúne los niveles de actividad de los sectores agropecuarios, de industria y de servicios y que se considera una previa del dato oficial del PIB, registró una caída acumulada del 4,15% durante los cuatro primeros meses del año.
El índice de actividad económica de Brasil se contrajo en abril un 15% con respecto al mismo mes del año anterior y un 9,7% con respecto al mes anterior, en el marco de la pandemia de coronavirus y sus efectos derivados en la economía, lo que supone el peor registro en este índice desde el comienzo de la serie histórica en 2003, según ha informado el Banco Central de Brasil.
El indicador, que reúne los niveles de actividad de los sectores agropecuarios, de industria y de servicios y que se considera una previa del dato oficial del Producto Interior Bruto (PIB), registró una caída acumulada del 4,15% durante los cuatro primeros meses del año.
En marzo, la actividad económica brasileña registró una caída del 6,1% con respecto a febrero, cuando se anotó un aumento del 0,3%. Previo a estos datos, la mayor caída registrada en el indicador se había producido en mayo de 2018, cuando la actividad económica descendió un 3,9%, en el marco de la crisis de los camioneros.
El Producto Interior Bruto (PIB) de Brasil se contrajo un 1,5% en los tres primeros meses del año, según datos del Instituto Brasileño de Geografía y Estadística (IBGE). Esta contracción interrumpió la tendencia de cuatro trimestres consecutivos de crecimiento y supuso el peor registro en el PIB brasileño desde el segundo trimestre de 2015, cuando el PIB se contrajo un 2,1%.
Por otro lado, las previsiones para la economía brasileña este año apuntan a una recesión severa y a unos niveles históricos de desempleo. La OCDE estimó que el PIB del país se podría contraer hasta un 9,1% en 2020 si se produjera un segundo brote de coronavirus, frente a una caída del 7,4% en caso de que la pandemia fuera controlada.