La cifra respaldó los planteamientos de funcionarios del gobierno que afirman que la mayor economía de Latinoamérica está perdiendo impulso más rápido de lo que habían pronosticado originalmente.
Rio de Janeiro. La economía de Brasil creció un 0,8% en el segundo trimestre frente al primero, en una muestra de la desaceleración de la actividad golpeada por factores globales e internos.
Los datos sobre la expansión del Producto Interno Bruto (PIB) en el segundo trimestre, divulgados este viernes por el estatal Instituto Brasileño de Geografía y Estadística (IBGE), estuvieron en línea con la mediana de los pronósticos de 17 analistas consultados por Reuters.
Frente a igual periodo del año pasado, el PIB brasileño creció un 3,1%.
La cifra respaldó los planteamientos de funcionarios del gobierno que afirman que la mayor economía de Latinoamérica está perdiendo impulso más rápido de lo que habían pronosticado originalmente.
Este miércoles y en votación dividida, el consejo de política monetaria del Banco Central rebajó la tasa de interés referencial, Selic, por primera vez en dos años, una medida que algunos inversores calificaron de prematura.
El IBGE revisó levemente a la baja el dato de crecimiento trimestral de los tres primeros meses del 2011 a un 1,2% desde un 1,3% informado previamente.
La desaceleración del crecimiento podría ayudar a las autoridades monetarias a rebajar la persistente inflación y permitirles reducir aún más las altas tasas de interés, luego del sorpresivo recorte de esta semana.
Sin embargo, este dato también refleja que Brasil, que ha destacado como un punto brillante en medio de la oscura economía global, corre el riesgo de quedar atrás de otros mercados emergentes de rápido crecimiento como China e India.
El país sudamericano podría sufrir un debilitamiento de las ganancias corporativas y una continua caída del índice referencial de acciones de la Bolsa de Sao Paulo, el Bovespa, que es uno de los que ha tenido un peor rendimiento a nivel global este año.
El Banco Central había elevado la tasa Selic cinco veces este año para enfriar el crecimiento y aliviar las presiones inflacionarias, pero esta semana sorprendió a los inversores al reducir la tasa de interés en medio punto porcentual, a un 12%.