El rango de pronóstico de crecimiento de la economía para el próximo año es de entre 3% y 8%, precisó el informe de política monetaria del equipo técnico del Banco Central. Para 2020 estima que el PIB registrará una contracción en un rango entre el 6% y 10%.
Bogotá. La economía de Colombia se expandiría alrededor de un 4,1% en 2021, tras la fuerte recesión en la que entró este año por la pandemia de coronavirus, proyectó el Banco Central en medio de una alta incertidumbre sobre cuándo regresará la actividad productiva a los niveles previos a la aparición del brote.
La cuarta economía de América Latina fue impactada por un doble choque de bajos precios del petróleo y las medidas de confinamiento decretadas para frenar el contagio del COVID-19, que ha provocado el cierre de empresas y ha disparado el desempleo.
El rango de pronóstico de crecimiento de la economía para el próximo año es de entre 3% y 8%, precisó el informe trimestral de política monetaria del equipo técnico del Banco Central, publicado este lunes en la noche.
Para 2020 el organismo estima que el Producto Interno Bruto (PIB) registrará una contracción en un rango entre el 6% y 10%, con un 8,5% como proyección más probable.
Las estimaciones del banco son considerablemente menos optimistas que las del gobierno, que espera una contracción económica de 5,5% para este año y una expansión de 6,6% el siguiente.
"La velocidad a la cual la economía se recupere y el momento en el que alcance sus niveles de actividad previos al choque de la pandemia son altamente inciertos", precisó el informe del banco emisor.
"Esto dependerá principalmente de la evolución de la situación sanitaria, tanto en el país como en el resto del mundo, así como de las medidas que se tomen para enfrentarla y de las consecuencias de largo plazo que se puedan generar", agregó.
En tanto, la inflación cerraría este año en un rango entre 1% y 2% con un 1,5% como cifra más probable, mientras que el 2021 fluctuaría entre un 2% y 3%.
"La inflación seguiría descendiendo hasta el primer trimestre de 2021, y posteriormente deberían empezar a observarse mayores ajustes anuales en los precios, en parte, por las menores bases de comparación del año anterior y por la reversión de algunos de los alivios decretados por el Gobierno", explicó el reporte.
"Esto sucedería en un entorno en el que los excesos de capacidad productiva se mantendrían amplios, la holgura del mercado de trabajo implicaría presiones mínimas de costos laborales, y las presiones provenientes del tipo de cambio serían moderadas", aseguró.
La ausencia de presiones inflacionarias ha permitido al directorio del Banco Central recortar en 200 puntos base su tasa de interés de referencia entre marzo y julio, llevándola a un mínimo histórico de 2,25%.