El Producto Interno Bruto (PIB) creció a una tasa anual de 1,5% tras expandirse a un ritmo de 3,9% en el segundo trimestre, dijo el jueves el Departamento de Comercio en su primera estimación del dato.
El crecimiento económico de Estados Unidos se frenó abruptamente en el tercer trimestre debido a que las empresas redujeron la restitución de bienes en sus almacenes para liquidar inventarios acumulados, aunque la sólida demanda interna podría alentar a la Reserva Federal a subir en diciembre las tasas de interés.
El Producto Interno Bruto (PIB) creció a una tasa anual de 1,5% tras expandirse a un ritmo de 3,9% en el segundo trimestre, dijo el jueves el Departamento de Comercio en su primera estimación del dato.
Sin embargo, el lastre de los inventarios probablemente será temporal y los economistas prevén que el crecimiento repunte en el cuarto trimestre debido a los sólidos cimientos internos.
La Fed dijo el miércoles que la economía estadounidense se expande a un ritmo "moderado" y puso sobre la mesa un alza de tasas en diciembre, con una referencia directa a su próxima reunión de política monetaria.
El banco central estadounidense ha mantenido la tasa de interés referencial cerca de cero desde diciembre de 2008.
"El crecimiento subyacente aún es enérgico, o, al menos, lo suficientemente sólido como para manejar tasas de interés que ya no estén en niveles mínimos de emergencia", comentó Jennifer Lee, economista senior de BMO Capital Markets en Toronto.
La economía ha tenido dificultades para mantener un ritmo de crecimiento más veloz desde fines de la recesión de 2007-2009, y la expansión anual promedio no ha podido subir de un 2,5%.
Economistas consultados en un sondeo de Reuters proyectaban que el PIB crecería a un ritmo de 1,6% en el tercer trimestre.
Las empresas acumularon US$56.800 millones en inventarios en el tercer trimestre, la cifra más baja desde el primer trimestre de 2014 y una fuerte reducción desde US$113.500 millones en el período de abril a junio. Hubo declives en inventarios manufactureros, mayoristas y minoristas.
La baja acumulación de inventarios restó 1,44 puntos porcentuales al PIB del tercer trimestre, la mayor merma desde el cuarto trimestre de 2012.
"Esa reducción de inventarios representa un poco una purga saludable que debería preparar a la economía para un crecimiento más fuerte en los próximos trimestre", dijo Jim Baird, socio y jefe de inversiones de Plante Moran Financial Advisors en Kalamazoo, Michigan.
El efecto de los inventarios fue contrarrestado por el gasto del consumidor, impulsado por la gasolina más barata y el fortalecimiento de los mercados de la vivienda y del trabajo.
El gasto del consumidor, que responde por más de dos tercios de la actividad económica en Estados Unidos, creció a una tasa de 3,2% tras aumentar a un ritmo de 3,6 por ciento en el segundo trimestre.
Pese a la fuerte demanda interna, la inflación retrocedió debido a la fortaleza del dólar y al precio más bajo de la gasolina.
El índice de precios de gastos de consumo personal (PCE, por su sigla en inglés) subió a una tasa de 1,2% tras avanzar un 2,2% en el segundo trimestre. Excluyendo alimentos y energía, los precios subieron a una tasa de 1,3%.