En una conferencia de prensa en el Palacio de Gobierno, en Quito, el presidente Correa dijo que se reunió con su equipo económico para definir las medidas ante la emergencia, la cual juzgó como "muy seria".
Quito. El gobierno de Ecuador anunciará "medidas temporales" para enfrentar la emergencia ocasionada por el terremoto que el sábado anterior devastó la zona costera del país, informó este miércoles el presidente ecuatoriano Rafael Correa.
En una conferencia de prensa en el Palacio de Gobierno, en Quito, Correa dijo que se reunió con su equipo económico para definir las medidas ante la emergencia, la cual juzgó como "muy seria".
"Habrá que tomar medidas temporales que serán anunciadas esta noche al país", afirmó el mandatario quien regresó este miércoles a Quito luego de recorrer desde el pasado domingo las zonas más destruidas por el terremoto.
El jefe de Estado, sostuvo que "es el momento de la unidad nacional, esto es durísimo, hemos llorado a nuestra gente".
El movimiento telúrico de 7,8 grados Richter ha dejado hasta ahora 525 muertos, más de 4.000 heridos, un número indeterminado de damnificados y cuantiosos daños en las provincias de Manabí (oeste) y Esmeraldas (norte), las más afectadas.
El presidente recalcó que el país enfrenta "el desastre más grande en casi 70 años", luego del terremoto de 6,8 grados Richter ocurrido en 1949 en la ciudad andina de Ambato con un saldo de más de 5.000 muertos y la desaparición de pueblos enteros.
Apuntó que el gobierno cuenta con una línea de contingencia de 600 millones de dólares para atender la emergencia, provenientes del Banco Mundial, del Banco Interamericano de Desarrollo (BID) y de la Corporación Andina de Fomento (CAF).
"Gracias a ésta línea de contingencia tenemos recursos disponibles para el corto plazo, que pueden aumentar en el mediano plazo", señaló.
El terremoto complica las finanzas del país sudamericano que desde el año pasado enfrenta dificultades económicas por la caída del precio del petróleo, su principal producto de exportación.
En marzo pasado el gobierno envío a la Asamblea Nacional (Poder Legislativo) una propuesta de reforma tributaria, la cual establece el incremento de impuestos a cigarrillos, la cerveza y bebidas azucaradas, para recaudar unos 300 millones de dólares.
