El comercio exterior no pasa por su mejor momento. El 2015 la balanza comercial total cerró con un déficit de $ 3.140 millones, según datos del Banco Central (BCE).
Quito. Ecuador busca diversificar su oferta exportable hacia más países y, además, ampliar sus fronteras fuera del continente americano. Aparte del Acuerdo Multipartes que espera cerrar hasta fines de año con la Unión Europea (UE), el Gobierno tiene negociaciones encaminadas con Centroamérica y Asia y está por empezar rondas con otros países europeos, con miras a incrementar sus exportaciones.
El comercio exterior no pasa por su mejor momento. El 2015 la balanza comercial total cerró con un déficit de $ 3.140 millones, según datos del Banco Central (BCE). Las exportaciones no petroleras alcanzaron $ 11.668 millones y las importaciones $ 17.340 millones, lo que dejó un saldo negativo de $ 5.672 millones en la balanza comercial no petrolera.
n el primer trimestre del 2016 la situación es similar. Las exportaciones no petroleras totalizaron $ 2.731 millones, un 12,5% menos ($ 391,5 millones) respecto al mismo periodo de 2015, según el BCE.
En ese escenario, el ministro de Comercio Exterior, Juan Carlos Cassinelli, anunció –en entrevista con este Diario– una agenda de negociaciones comerciales para 2016. Además del Multipartes con la UE, dijo que desde el 2006 hay seis acuerdos comerciales negociados: tres de alcance parcial de complementación económica con el Mercosur (Brasil, Paraguay, Uruguay, Argentina), con Chile y con Guatemala; un segundo protocolo de alcance parcial de complementación económica con Cuba, un acuerdo de cooperación con Venezuela y uno comercial con Irán, que ya fue ratificado por la Asamblea este 10 de mayo.
A más de esos tratados ya encaminados, hay otros seis en negociación con El Salvador, Honduras, Cuba (una ampliación del ya existente) y Nicaragua, el cual, según el ministro, está “prácticamente listo”. Y fuera de América Latina con Turquía y Corea, este último por entrar a la tercera ronda de negociaciones.
Todos son destinos a los que Ecuador ya exporta y con los que, luego de los acuerdos, espera aumentar entre un 18% y 100% los ingresos anuales percibidos por exportaciones.
Antes del acuerdo con Irán, Ecuador contaba con tratados comerciales preferenciales con doce países, todos en la región latinoamericana, según un análisis de la Federación Ecuatoriana de Exportadores (Fedexpor) sobre la agenda de acuerdos comerciales del país. De estos, solo uno se ha logrado incorporar en los últimos cinco años (de Alcance Parcial con Guatemala en 2013).
“A manera de comparación, Chile, Perú, México, Costa Rica y Colombia han incorporado entre 6 y 15 acuerdos comerciales a su estrategia de promoción de exportaciones en los últimos 15 años, mientras que Ecuador solo dos (Mercosur y Guatemala, sin incluir aún la UE)”, indica esa publicación de febrero.
Santiago Bucaram, economista docente de la Universidad San Francisco de Quito, considera que cualquier tipo de acuerdo comercial que Ecuador logre es positivo, incluso con Irán (cuyo intercambio comercial es bajo), porque al tener solo 16 millones de habitantes no puede crecer hacia adentro. Abrirse es la forma de aumentar las exportaciones y, al mismo tiempo, traer materias primas y bienes de capital. Pero ve una “reacción muy tardía” comenzarlos a impulsar ahora cuando debieron haberlos establecido desde el comienzo.
Con ello coincide Daniel Legarda, presidente ejecutivo de Fedexpor. La semana pasada destacó el acuerdo con la UE pero dijo que “ojalá esa misma convicción” se tuviera con otros socios como Estados Unidos, el principal destino de las exportaciones no petroleras ($ 3.040 millones en 2015) y que, junto a la UE, concentran el 50% de las exportaciones ecuatorianas. “En contraste, Irán suma el 0,007% de las exportaciones no petroleras, hay que priorizar ese tema”, indicó Legarda.
Pablo Arosemena, presidente de la Cámara de Comercio de Guayaquil, también cree que han fallado las prioridades en materia de acuerdos comerciales, más cuando Colombia y Perú, con una oferta similar de productos, llevan tres años de adelanto con la UE, y Ecuador es el único país del Pacífico con el que Estados Unidos no tiene un acuerdo.
Bucaram y Arosemena coinciden en que no se ha buscado por una razón ideológica, porque la relación de Ecuador con EE.UU. “es complementaria y no competitiva”.
Según Casinelli, el tema no pasa por un asunto ideológico sino de concepto de mercado. “Tenemos la necesidad de impulsar acuerdos comerciales donde la producción y la productividad del Ecuador sea precautelada hasta que tenga condiciones de competitividad adecuadas (...), estamos dispuestos a conversar, siempre que la relación tenga utilidad para ambas partes. Y en el caso de EE.UU. tenemos cuatro oficinas de Pro Ecuador trabajando allá permanentemente, fomentando”, dijo.
El ministro agregó que también apuntan a otros mercados independientemente del tamaño. Ya hay una ronda pactada en los próximos meses con la EFTA, una asociación de comercio que integran Islandia, Noruega, Suiza y Liechtenstein, en busca de un acuerdo, y convenios de inversiones que se tratan con Canadá y Costa Rica.