Esta semana China realiza una revisión bianual de sus políticas comerciales en la Organización Mundial de Comercio, en la que los otros 162 miembros del organismo pueden interrogar a los funcionarios chinos y comentar sus políticas.
A Estados Unidos le preocupa que China esté echando pie atrás en sus compromisos de abrir su economía a las fuerzas de mercado en sus intentos por lidiar con la desaceleración de su crecimiento económico, dijo el martes el diplomático comercial estadounidense Chris Wilson a la OMC.
Esta semana China realiza una revisión bianual de sus políticas comerciales en la Organización Mundial de Comercio, en la que los otros 162 miembros del organismo pueden interrogar a los funcionarios chinos y comentar sus políticas.
Wilson, segundo al mando de la misión estadounidense ante la OMC, dijo que los líderes chinos habían refrendado varios pronunciamientos de reforma de largo alcance, incluyendo que el mercado sería "decisivo" en la asignación de recursos, y que estaba claro que se estaban haciendo esfuerzos serios.
"No obstante, durante el último año, en la medida que la economía china se ha frenado, Estados Unidos ha sentido una renuencia creciente entre los encargados de la planificación económica de China en buscar más reformas", comentó Wilson, según una transcripción publicada.
"Además, más y más empresas estadounidenses han expresado preocupación sobre un ambiente regulatorio y de negocios menos acogedor hacia las empresas extranjeras", agregó.
El apoyo de China hacia sus industrias del acero y el aluminio muestra claramente que la intervención estatal nunca será tan eficiente como el mercado, agregó Wilson.
Otras preocupaciones de Estados Unidos incluyen las cuotas y los aranceles sobre las exportaciones de materias primas de China, los reembolsos manipulados del impuesto al valor agregado sobre exportaciones, las escasas importaciones agrícolas pese a la fuerte demanda y la prohibición de la inversión extranjera en el mercado del cine de China, el segundo mayor del mundo.
Las declaraciones de Wilson se conocen a menos de una semana de las quejas presentadas por Estados Unidos y por la Unión Europea ante la OMC por los aranceles a las exportaciones que impuso China sobre metales y minerales clave.