Líderes sindicales de Canadá y Estados Unidos acusan que las leyes laborales más flexibles y sueldos más bajos de México elevan las ganancias corporativas a expensas de los trabajadores de sus países, haciendo del asunto uno de las más disputados de las negociaciones del TLCAN.
Las negociaciones para modernizar el TLCAN se aceleraron el martes con la llegada de representantes de alto rango de Canadá, Estados Unidos y México a Ottawa, donde se espera que Estados Unidos proponga el borrador de un texto sobre empleo, inversión y propiedad intelectual.
Líderes sindicales de Canadá y Estados Unidos acusan que las leyes laborales más flexibles y sueldos más bajos de México elevan las ganancias corporativas a expensas de los trabajadores de sus países, haciendo del asunto uno de las más disputados de las negociaciones del TLCAN.
Funcionarios con conocimiento de la propuesta que presentará Estados Unidos dijeron que el texto no ofrecerá detalles sobre los sueldos de los trabajadores. Líderes empresariales mexicanos han dicho que los derechos y pagos a los trabajadores son un asunto interno que cada país debe resolver.
El representante de Comercio de Estados Unidos, Robert Lighthizer; la ministra de Relaciones Exteriores de Canadá Chrystia Freeland y el secretario de Economía de México, Ildefonso Guajardo se unirán a las conversaciones de los últimos dos días de la ronda. El próximo ciclo se realizará en Washington en octubre.
Los miembros del bloque quieren tener un acuerdo para fines de año, antes de la campaña presidencial de México.
El martes se tratará el tema más espinoso de las negociaciones, las normas de origen que dictan qué parte de los componentes de un vehículo debe originarse dentro de Norteamérica para calificar para el estatus de libre de aranceles bajo el TLCAN.
Estados Unidos aún no presenta sus demandas. El lunes, el principal negociador de Estados Unidos rechazó preguntas sobre por qué su equipo no ha entregado propuestas específicas sobre asuntos claves diciendo "no veo un problema".
El gobierno de Donald Trump quiere más contenido estadounidense en los autos, la principal fuente del déficit de 64.000 millones de dólares con México y de 11.000 millones de dólares con Canadá.