El Departamento de Comercio corrigió la cifra de 3% informada preliminarmente, debido la recorte de los gastos de los consumidores y de las empresas.

Washington. La economía de Estados Unidos creció menos de lo estimado previamente en el primer trimestre, al recortarse las proyecciones de gastos de los consumidores y las empresas.

En su lectura final de crecimiento del Producto Interno Bruto (PIB) de Estados Unidos en el primer trimestre, el Departamento de Comercio dijo que la economía se expandió a un ritmo anual de 2,7%, en lugar de 3,0% reportado en la estimación avanzada del mes pasado.

Aunque el crecimiento estuvo por debajo de las expectativas del mercado de una tasa del 3,0%, aún así marcó el tercer trimestre consecutivo de expansión mientras la economía emerge de su peor caída desde los años 1930.

Sin embargo, los últimos datos económicos sugieren que la recuperación ha perdido cierto impulso en el segundo trimestre, debido a que el elevado desempleo ha seguido restringiendo el gasto del consumidor, lo que ha redundado además en una desaceleración en la construcción y compra de viviendas.

Las acciones en Wall Street abrieron con leves alzas pese al informe, mientras que los precios de los bonos del Tesoro subieron brevemente para luego borrar su avance y cotizar planos. El dólar por su parte extendió su declive frente al yen.

"Hay un crecimiento irregular, en vez de una contracción general. No estamos generando un crecimiento en los ingresos reales como el que nos gustaría. Es una recuperación que tiene un peso real en su espalda", dijo Paul Ballew, economista de Nationwide en Columbus, Ohio.

Esta semana, la Reserva Federal se mostró cautelosa respecto a la economía y dijo que la recuperación estaba "avanzando". Sin embargo, no se espera que la economía vuelva a caer en recesión.

En su reunión de política monetaria, el banco central mantuvo sus tasas de interés a un día en rangos de entre un cero y 0,25%, y renovó su compromiso de mantener una política de tasas bajas por un tiempo prolongado.

El PIB, que mide el total de bienes y servicios producidos en el país, creció a un ritmo de 5,6% durante el cuarto trimestre.

Débil inversión empresarial. El crecimiento en el período de enero a marzo fue contenido por el gasto empresarial, que sólo creció 2,2%, en lugar del 3,1% reportado el mes pasado.

La inversión en infraestructura fue revisada a la baja para mostrar un declive ligeramente mayor al reportado en mayo. En tanto, el crecimiento de la inversión en software y equipos fue rebajado a 11,4% desde 12,7%.

El gasto empresarial creció a una tasa del 5,3% durante el cuarto trimestre.

Otro lastre para el PIB fueron las exportaciones, cuyo crecimiento fue eclipsado por un alza de las importaciones, lo que generó un déficit comercial que afectó negativamente al PIB.

Las economías de los gobiernos locales y estatales también fueron una carga, ya que sus gastos cayeron a su ritmo más intenso desde el segundo trimestre de 1981.

La débil inversión en construcción de viviendas cesó su crecimiento en el primer trimestre. La caída en edificación de casas se produce tras dos trimestres de crecimiento y pone de manifiesto la fragilidad de la recuperación del mercado inmobiliario tras una contracción de tres años.

Gasto de consumidores. En tanto, el gasto del consumidor también fue revisado a la baja a una tasa de 3,0%. Aunque el alza se ubicó por debajo de 3,5% reportado el mes anterior, superó con creces 1,6% del cuarto trimestre y representó su mayor avance en tres años.

El gasto del consumidor, que generalmente representa más de dos tercios de la actividad económica del país, añadió 2,13 puntos porcentuales al PIB el trimestre pasado, su mayor contribución desde los primeros tres meses del 2007.

Sin embargo, las ventas finales reales a compradores domésticos, considerado un medidor más cercano de la demanda interna, subieron 1,6% en lugar de 2,0% anunciado el mes pasado.

El crecimiento también se apoyó en los inventarios empresariales, que crecieron en US$41.200 millones de dólares en lugar de los US$33.900 millones reportados inicialmente.

El alza en los inventarios contribuyó con 1,88 puntos porcentuales al PIB.

Según el informe, las ganancias corporativas tributables crecieron 5% en el primer trimestre, más que 2,1% de incremento previsto en mayo.