Lo anterior, principalmente tras la decisión de la agencia Standard & Poor’s de bajarle la nota a la deuda soberana de ese país.
Sala de Inversión. La constante disputa entre el gobierno argentino y las agencias clasificadoras no da tregua. hace pocos días el titular de Economía hizo una fuerte crítica hacia esas instituciones.
Así los especialistas pronostican que podrían generarse importantes oportunidades de compra especulativa de acciones y bonos.
Lo anterior, principalmente tras la decisión de la agencia Standard & Poor’s de bajarle la nota a la deuda soberana de ese país.
La decisión de la calificadora de riesgo fue tomada luego de que el gobierno del Chaco pagara en pesos el cupón que estaba nominado en dólares. A esto, se le suma la incertidumbre generada por el proyecto oficial de reforma del sector bursátil y el reciente fallo judicial en los Estados Unidos a favor de un tenedor de bonos defaulteados.
Expertos consultados por Sala de Inversión América coinciden en que estos factores han generado durante el último mes un ruido tal en el mercado local, que podrían desencadenarse compras especulativas, siempre considerando el riesgo implícito de invertir en el contexto actual.
Standard & Poor’s redujo la nota para la deuda del país de “B” a "B-” y dejó al país muy cerca del rango de débil calidad crediticia. Al mismo tiempo, Fitch colocó a la Argentina en revisión para una posible bajada debido a la incertidumbre sobre su capacidad para cumplir con sus obligaciones financieras tras la decisión judicial.
Actualmente, esta agencia asigna la calificación “B” a los bonos de largo plazo del país emitidos en moneda extranjera. “La renta fija y la variable sufrieron por igual en un mes complicado”, afirman los analistas Juan Pablo Vera y Adrián Rivas, de Tavelli & Cía Sociedad de Bolsa, en su informe mensual sobre rendimientos de octubre.
En efecto, todos los factores mencionados ocurrieron en el mes pasado, lo que se vio reflejado en el rendimiento del índice Merval, que cayó un 5,20% (nivel similar al testeado en el mes de julio pasado), y en el de los bonos, que también mostraron un movimiento negativo.
En tanto, el riesgo país medido por JP Morgan subió ayer hasta los 1.057 puntos y se incrementó respecto al día anterior poco más de un 3%. Por su parte, los Credit Default Swap (CDS) a cinco años de la Argentina se dispararon hasta los 1.775 puntos, y alcanzaron su valor más alto de los últimos tres años.
“Creo que el mercado sobre-reaccionó a las noticias de las calificadoras. Pero sin duda, la Argentina es muy riesgosa y las señales que provienen del Gobierno no son las mejores. Es más, aumentan la incertidumbre”, asegura Diego Martínez Burzaco, economista jefe de Inversor Global.
Adrián Mayoral, de Mayoral Bursátil, coincide y agrega que “después de 2001, el mercado está muy sensible. En este momento, hay una postura de salir de la Argentina porque hay mucho ruido; hay una presión vendedora muy fuerte sobre los bonos”.
Sin embargo, si en el mercado de acciones local la caída de precios se profundizara y “llegara a bajar el ruido, seguro es una oportunidad de compra, aunque con la vista puesta en el largo plazo”, sintetiza otro analista local.
La Bolsa de la Argentina es una de las más baratas, coinciden los expertos. Mayoral señala que el “volumen ya era paupérrimo y el precio de las acciones ya está muy bajo. Está anulada la tendencia alcista, y hay que ver si resiste una tendencia descendente”.
Actualmente, uno de los motivos que más está pesando sobre el precio de las acciones es el proyecto de ley para reformar el mercado de capitales argentino. “El mercado se pregunta cómo se va a utilizar la reforma, cómo se va a actuar contra empresas que están contra el Gobierno, como Clarín”, dispara una fuente del sector bursátil.
Mayoral agrega que a este escenario se le suma la situación económica actual, que ya no es de expansión, y agrega que el escenario político la complica. Con todo, considera que en la Argentina “es momento de acumulación selectiva” en términos de inversión.
De cara a los inversores, el analista recomienda las acciones de Petrobrás Brasil (PBR), Siderar, Grupo Financiero Galicia (GGAL) y Tenaris (TS), si baja un poco más. Este último papel cayó en octubre un 3,70%, pero acumula una ganancia del 44,30% en lo que va del año.
Sin embargo, Martínez Burzaco, dibuja un panorama negro para el futuro cercano de las compañías que cotizan en Bolsa: “Las empresas verán aún más limitadas sus fuentes de financiamiento. Generalmente, a una rebaja de nota soberana le siguen rebajas de notas corporativas. Si a eso le sumamos que las empresas que tienen deuda en dólares muy posiblemente no puedan acceder al mercado cambiario, la situación luce peor”, concluye.