La directora gerente del FMI, Kristalina Georgieva, dijo que Perú había logrado resultados macroeconómicos impresionantes debido a sus "marcos políticos e institucionales muy sólidos", pero que el país seguía siendo vulnerable a los riesgos externos, como el coronavirus.
Washington. El Fondo Monetario Internacional dijo este jueves que su junta ejecutiva aprobó una línea de crédito flexible de dos años para Perú por US$11.000 millones para ser utilizada como financiamiento preventivo, mientras el país rico en cobre lucha por contener el avance del nuevo coronavirus.
La directora gerente del FMI, Kristalina Georgieva, dijo en un comunicado que Perú había logrado resultados macroeconómicos impresionantes debido a sus "marcos políticos e institucionales muy sólidos", pero que el país seguía siendo vulnerable a los riesgos externos, incluido un brote prolongado del virus.
"El choque de la COVID-19 plantea un desafío extraordinario, que está empujando a la economía peruana a una recesión", dijo.
"Las autoridades han respondido decisivamente implementando medidas estrictas de contención y un gran paquete de políticas para limitar las consecuencias socioeconómicas, lo que ha sido posible gracias al amplio espacio fiscal y la credibilidad de la política monetaria de Perú", agregó Georgieva.
El Gobierno del presidente Martín Vizcarra está buscando financiar un anunciado histórico paquete de estímulo equivalente a alrededor del 17% del Producto Interno Bruto, para mitigar los efectos de una cuarenta que prácticamente ha paralizado la economía y dejado millones sin empleo.
Perú ha extendido una cuarentena hasta fines de junio y el Gobierno ha dado el visto bueno para reanudar algunas actividades clave de su economía, mientras crece el número de casos de coronavirus. La cifra de contagios aumentó el miércoles a 141.779 y los fallecidos a 4.099.
El segundo mayor productor de cobre del mundo anunció a inicios de mayo la autorización para emitir un nuevo bono de hasta US$4.000 millones para ayudar a compensar el impacto de la crisis generada por el coronavirus.
Georgieva del FMI afirmó que un brote prolongado del nuevo coronavirus tendría repercusiones significativas para los flujos comerciales y financieros, "lo que podría ejercer una presión significativa sobre la balanza de pagos de Perú y acrecentar el impacto interno adverso del choque de la COVID".
El nuevo acuerdo del FMI serviría como un seguro temporal y debería reforzar la confianza en momentos de mayor incertidumbre mundial, refirió la líder del organismo internacional.
La línea de crédito flexible del FMI se estableció en 2009 para evitar crisis, lo que brinda a los países con un historial muy sólido la flexibilidad de retirar fondos en cualquier momento durante el período del acuerdo. Los desembolsos no están escalonados ni condicionados al cumplimiento de los objetivos de política como en los programas tradicionales del FMI.