El Fondo Monetario Internacional cree que el dinero digital puede hacer que los pagos sean más accesibles, pero advirtió que para que eso suceda, las autoridades deben enfrentar desafíos clave.

El Fondo Monetario Internacional debe aumentar sus recursos mientras busca "monitorizar, asesorar y ayudar a administrar esta transición compleja y de gran alcance" al dinero digital, según un documento de la entidad publicado el jueves.

El dinero digital puede hacer que los pagos sean más accesibles, rápidos y baratos, sostuvo el reporte.

Pero para que eso suceda, las autoridades deben enfrentar desafíos clave: el efectivo digital debe ser confiable, debe proteger la estabilidad económica y financiera nacional, y la estabilidad del sistema monetario internacional debe mantenerse.

"El FMI tiene un papel fundamental que desempeñar para ayudar a sus miembros a aprovechar los beneficios y gestionar los riesgos del dinero digital", sostuvo la entidad.

Es importante destacar que el dinero digital "debe ser regulado, diseñado y proporcionado para que los países mantengan el control sobre la política monetaria, las condiciones financieras, la apertura de la cuenta de capital y los regímenes cambiarios".

El documento hace la distinción entre las monedas digitales de un banco central, las monedas estables y el dinero electrónico, en el que se centra, y los criptoactivos que incluyen bitcóin.

"Si bien se consideran diferentes tipos de dinero digital, este documento no se pronuncia sobre qué forma puede predominar".

El documento, con fecha de marzo, discutido por el directorio del FMI en abril y publicado el jueves, ofrece una visión de la evolución del Fondo y cómo busca asociarse con otras organizaciones como bancos centrales, reguladores y el Banco Mundial.

"El Fondo debe fortalecer, ampliar y profundizar rápidamente su trabajo bien establecido sobre dinero digital, mientras se coordina y colabora estrechamente con otras instituciones dentro de los límites de su mandato. El Fondo también debe aumentar rápidamente sus recursos dedicados a estos temas", apuntó el organismo.

En una publicación de blog separada a principios de esta semana, el director del departamento de mercados monetarios y de capital del FMI y el director de su departamento legal dijeron que cualquier intento de usar criptoactivos como monedas nacionales sería arriesgado.

Las ventajas "incluido el potencial de servicios financieros más baratos e inclusivos, no deben pasarse por alto", dijeron.

"Los gobiernos, sin embargo, deben intensificar la prestación de estos servicios y aprovechar las nuevas formas digitales de dinero al tiempo que preservan la estabilidad, la eficiencia, la igualdad y la sostenibilidad ambiental. Intentar convertir los criptoactivos en una moneda nacional es un atajo desaconsejable", apuntó.