Con la prima de riesgo y las rentabilidades de los bonos domésticos en máximos históricos desde el lanzamiento del euro en 1999, el mercado continúa golpeado por la convicción de que estos niveles no son sostenibles por tiempo ilimitado y acercan al país a un rescate soberano.
Madrid. El Tesoro Público español colocó la totalidad del objetivo máximo de 3.000 millones de euros, aunque a un coste de financiación bastante más elevado que el pagado en las emisiones anteriores y que superó el 5% en un clima de extrema tensión en el mercado secundario.
Con la prima de riesgo y las rentabilidades de los bonos domésticos en máximos históricos desde el lanzamiento del euro en 1999, el mercado continúa golpeado por la convicción de que estos niveles no son sostenibles por tiempo ilimitado y acercan al país a un rescate soberano.
Según operadores, el mercado cotiza negativamente los términos del reciente rescate al sistema bancario español que, bajo su fórmula actual, tendría un efecto negativo sobre la ratio deuda/PIB además de persistir las dudas sobre la capacidad del país para recuperar tasas de crecimiento positivas en medio de una severa política de reducción del déficit público.
En este contexto, el Tesoro colocó 2.401 millones de euros en Letras a 12 meses, frente a peticiones de 5.181 millones, con un tipo marginal del 5,200% desde el 3,099% de la anterior emisión del 14 de mayo.
En Letras a 18 meses colocó 639 millones de euros, frente a peticiones de 2.824 millones, con un tipo marginal del 5,350% desde el 3,404% de la anterior emisión del 14 de mayo.
A las 10:45 horas, el diferencial de la deuda española a 10 años frente a su equivalente alemán se situaba en zona de máximos históricos a unos 573 puntos básicos (pb) y la rentabilidad del bono benchmark a 10 años también marcaba máximos del 7,18%.