Representantes empresariales opuestos y aliados al gobierno actual coinciden en que, antes de analizar cualquier propuesta de nuevo salario mínimo para 2013, hay que esperar los resultados de las finanzas públicas del cierre de este año.
Gremios como Fedeindustria y Fedecámaras reiteraron la importancia de consultar a los sectores productivos sobre las políticas de aumentos de sueldo.
Representantes empresariales opuestos y aliados al Gobierno actual coinciden en que, antes de analizar cualquier propuesta de nuevo salario mínimo para 2013, hay que esperar los resultados de las finanzas públicas del cierre de este año.
"Es muy difícil pronunciarse sobre los Bs. 2.500 (US$581) de salario mínimo que propuso el candidato de la oposición, Henrique Capriles Radonski, previamente a los resultados de las finanzas públicas del país que, además, en este momento están en una opacidad total", dijo el presidente de la Comisión de Asuntos Laborales de Fedecámaras, Aurelio Concheso.
Acotó que "hay que poner en tela de juicio cualquier cifra oficial actual, porque se desconoce cuánto se le ha regalado a Cuba o cuál es la verdadera inflación".
Por su parte Miguel Pérez Abad, de Fedeindustria, calificó de "aventurada e irresponsable" la promesa del candidato de la Mesa de la Unidad Democrática (MUD) de elevar 22% el salario mínimo a partir de enero, "sin que haya cerrado el año, ni conocer en detalle los compromisos públicos del Estado, ni tener una visión de las finanzas del país".
Concheso supone que el comando de campaña de Capriles Radonski maneja información que el sector empresarial desconoce. "Se rumora que en el mismo Banco Central y en la administración pública hay personas responsables que hacen llegar información que le permite al comando opositor hacer evaluaciones preliminares", dijo.
El experto laboral de la máxima cúpula empresarial considera que "determinar si el nivel de salario mínimo propuesto por Capriles Radonski a partir de enero es factible o conveniente, dependerá mucho de cuál es la situación real del país y monetaria en ese momento, así como de cuáles políticas de tipo de cambio y fiscal se estén aplicando".
El presidente de Consecomercio, Carlos Fernández, dijo que aún no ha leído la propuesta de Capriles Radonski, por lo que prefirió no opinar.
Alejandro Uzcátegui, presidente de Empreven, señaló que prefiere no participar en este debate político, por lo que sólo declarará después del 7 de octubre.
Esperan ser consultados. Pérez Abad criticó que Capriles aún no ha llegado a la presidencia y ya está ofreciendo aumentar el salario mínimo, sin consultarlo con los sectores productivos. Aseguró que en el Gobierno de Chávez se consulta a los empresarios su opinión sobre el aumento salarial a comienzos de cada año.
Concheso cree que "un gobierno de la MUD retomaría la consulta tripartita que establecía la anterior Ley Orgánica del Trabajo, y consultaría a los empresarios partiendo de esa cifra salarial como un piso sobre el cual pudiera haber mejoras adicionales".