Los datos manejados por parlamentarios revelan que el año pasado el presupuesto asignó más de US$ 251,2 millones para el pago de las bonificaciones y gratificaciones y para el presente ejercicio, el monto estipulado es de G. 1,2 billones US$ 229,2 millones.

Asunción. A más de G. 3,6 billones (US$ 662,2 millones) en total ascienden los fondos asignados en el presupuesto 2015, 2016 y el proyecto de presupuesto general 2017 para el pago de bonificaciones y gratificaciones en el sector público, ítem en el que se incluyen los dos aguinaldos extras que perciben los funcionarios, que es un tema que indignó a la ciudadanía en los últimos días.

Los datos manejados por parlamentarios revelan que el año pasado el presupuesto asignó más de G. 1,3 billones (US$ 251,2 millones) para el pago de las bonificaciones y gratificaciones y para el presente ejercicio, el monto estipulado es de G. 1,2 billones (US$ 229,2 millones).

Para el próximo año el proyecto de Presupuesto General de la Nación 2017, que está actualmente en estudio en la Comisión Bicameral de Presupuesto del Congreso, prevé un monto que superaría G. 1 billón (181,1 millones), dentro del cual el aguinaldo extra en teoría sería ahora eliminada totalmente, según el anuncio hecho por el Poder Ejecutivo.

En total, los “extras” incluidos en el presupuesto 2015, el 2016 y el proyecto de presupuesto 2017 representan más de G. 3,6 billones (US$ 662,2 millones), en este caso para bonificaciones y gratificaciones. Este monto es mayor a la emisión de bonos que se tiene prevista para el año venidero, a fin de “bicicletear” las deudas y cubrir parte de las inversiones en infraestructura.

Estos recursos asignados para el aguinaldo extra, sin embargo, ya no debían haber sido presupuestados desde el ejercicio 2015, porque con la implementación de la nueva matriz salarial, en ese año se tendría que haber eliminado para “sincerar” todos los ingresos del personal público.

La matriz salarial supuestamente fusionaba el 70% de las bonificaciones y gratificaciones al sueldo, pero siguió manteniendo por fuera de este sistema de pago del aguinaldo extra bajo el ropaje de “gratificación” o “premio por mayor producción”. Según datos oficiales de la Presidencia de la República, este año tenían asignados para el pago de dicho beneficio unas 25 instituciones públicas, entre ministerios, secretarías, empresas públicas, entidades autónomas y otros.

Estas entidades realizaron el primer pago entre marzo y setiembre, que demandó un total de G. 56.608 millones (US$ 10,2 millones) y se estima que este segundo pago representaría el mismo monto, lo que ahora ya no se abonaría por la prohibición emitida por el Ejecutivo a través del Decreto N° 6012, por el cual se suspende el pago establecido en el artículo 40 de la Ley N° 5554/16 de Presupuesto General de la Nación.

Este artículo es el que faculta a abonar hasta dos gratificaciones o premios o aguinaldo extra como se lo conoce, con el cual los funcionarios cobran finalmente tres en el año, ya que en diciembre se abona el que está establecido en el Código Laboral para todos los trabajadores.

Las autoridades del Gobierno no emitieron ayer ninguna declaración sobre las críticas realizadas sobre la matriz salarial, que se implementa desde el año 2015 y que con ello se debía haber eliminado ya las bonificaciones y gratificaciones adicionales, que sin embargo, a pesar de ello los funcionarios seguían cobrando sus dos aguinaldos extras hasta el presente mes. Ayer intentamos conocer la versión del ministro de la Secretaría de la Función Pública, Humberto Peralta, quien fue uno de los que lideró la implementación de la matriz, pero no atendió nuestro llamado ni los mensajes. También la del ministro de Hacienda, Santiago Peña, pero este tampoco respondió a los mensajes.