El dato ilustra la vulnerabilidad de la economía estadounidense a la fortaleza del dólar y a la debilidad de la demanda en mercados extranjeros, lo que podría llevar a que la Reserva Federal sea aún más cauta a la hora de subir las tasas de interés.
El déficit comercial de Estados Unidos registró en agosto su mayor incremento en cinco meses debido a la debilidad de las exportaciones ante la vacilante economía global y el aumento de importaciones de bienes chinos.
El déficit comercial creció un 15,6% en agosto, a US$48.300 millones dijo el martes el Departamento de Comercio. La magnitud del incremento fue acentuada por el déficit comercial inusualmente bajo de julio.
Economistas consultados en un sondeo de Reuters proyectaban un déficit comercial de US$47.400 millones en agosto.
El dato ilustra la vulnerabilidad de la economía estadounidense a la fortaleza del dólar y a la debilidad de la demanda en mercados extranjeros, lo que podría llevar a que la Reserva Federal sea aún más cauta a la hora de subir las tasas de interés.
El tamaño de la brecha comercial está bastante por encima de los niveles vistos en años recientes. Eso hace que un crecimiento económico más sólido dependa de los consumidores estadounidenses, dado que el resto del mundo probablemente será un lastre para la expansión.
Las exportaciones en general cayeron un 2% y a su nivel más bajo desde octubre del 2012.
Los envíos a México bajaron en US$1.500 millones en agosto, mientras que la Unión Europea compró US$500 millones menos que en julio a Estados Unidos, según datos de comercio bilateral no ajustados por estacionalidad.
Los declives se deben en parte a expectativas de tasas de interés más altas en Estados Unidos, que han impulsado el valor del dólar, reflejando la fortaleza de la economía estadounidense frente a las de sus socios comerciales.
Un dólar más fuerte hace que los bienes estadounidenses resulten menos competitivos en el exterior.
La debilidad de la demanda externa también juega un papel, y el secretario del Tesoro de Estados Unidos, Jack Lew, pedirá a las autoridades económicas de otros países reunidas esta semana en Lima, Perú, que estimulen a sus respectivas economías para reactivar al crecimiento global.
Un aumento de un 3 por ciento de las importaciones desde China también influyó en el aumento del déficit comercial. El yuan chino se ha devaluado con fuerza en los últimos meses por preocupaciones de un posible colapso de la economía china, la segunda más grande del mundo después de la estadounidense.
Los rendimientos de la deuda estadounidense siguieron cayendo tras el reporte, mientras que las acciones de Wall Street abrieron a la baja.
En agosto, las importaciones estadounidenses subieron un 1,2 por ciento, aunque Estados Unidos compró el menor volumen de petróleo en el exterior desde septiembre de 2004.