Río de Janeiro, cuyo presupuesto se ha visto afectado por un desplome de casi un 40% en el precio del crudo Brent de Londres en el último año, ha estado presionando al regulador ANP para que cambie la forma cómo se determina el llamado precio de referencia del petróleo.
El estado de Río de Janeiro, donde se concentra la mayor parte de la producción de petróleo de Brasil, amenazó el lunes con imponer un nuevo impuesto al crudo y el gas natural si el regulador petrolero del país no ajusta su cálculo de las regalías que recibe.
El estado, cuyo presupuesto se ha visto afectado por un desplome de casi un 40% en el precio del crudo Brent de Londres en el último año, ha estado presionando al regulador ANP para que cambie la forma cómo se determina el llamado precio de referencia del petróleo.
Si no se modifica el cálculo, el gobierno planea aplicar un impuesto de 2,71 reales (69,8 centavos de dólar) a cada barril de petróleo o equivalente de gas natural producido en los campos ubicados en las aguas del estado.
Eso recaudaría alrededor de 1.800 millones de reales (US$464 millones) en el 2016, poco más que los 1.600 millones de reales que el estado está perdiendo debido al cálculo actual, dijeron funcionarios estatales a Reuters el lunes.
Río de Janeiro produce el 67 por ciento del petróleo de Brasil y el 40 por ciento de su gas natural. Entre los principales productores del estado están la petrolera estatal Petroleo Brasileiro SA (Petrobras), BG Group Plc y Royal Dutch Shell Plc.