La debilidad del euro también afectaba al dólar, que bajaba 0,5% en el día, pero la aversión al riesgo generalizada mantenía a la moneda estadounidense con alzas ante el franco y el yen.
Londres. El euro se depreció este miércoles hasta mínimos de tres meses contra el franco suizo luego de datos que apuntaron a una desaceleración de la actividad de negocios de Europa, generando dudas sobre el momento en que el banco central del bloque podrá subir sus tasas de interés.
La debilidad del euro también afectaba al dólar, que bajaba 0,5% en el día, pero la aversión al riesgo generalizada mantenía a la moneda estadounidense con alzas ante el franco y el yen.
El yen se apreciaba 1,2% contra el dólar y se encaminaba a anotar su mayor avance diario en más de un año, en medio de la cautela de los inversores en el mercado cambiario un día después de que el presidente estadounidense, Donald Trump, moderó su optimismo sobre el progreso de las conversaciones comerciales con China.
"El euro está afrontando vientos en contra estructurales porque los datos de PMI no muestran señales de repuntar mientras que la situación en Italia también está perjudicando la confianza", dijo Richard Falkenhall, estratega senior de tipos de cambio de la firma SEB.
El crecimiento económico de la zona euro se desaceleró de forma mucho más abrupta de lo previsto este mes, mostró un sondeo sobre el sector empresarial, lo que junto a una inflación más débil ha intensificado las preocupaciones de que no habrá vuelta a los recientes tiempos de bonanza en el bloque.
Si bien el dólar ganaba 0,4% contra una cesta de monedas rivales y cotizaba en 94 unidades, se debilitaba un 1,2% ante el yen y bajaba 0,6% ante el franco suizo.
El euro se depreció a un mínimo de seis meses después de un dato que indicó que el crecimiento del sector privado de Alemania se desaceleró en mayo a su menor nivel en más de un año y medio, lo que indica que el impulso de la mayor economía de la zona euro se está agotando.
Los inversores ahora están a la espera de la divulgación más tarde en el día de las minutas de la última reunión de la Reserva Federal de Estados Unidos, cuando la entidad decidió dejar sin cambios sus tasas de interés.