S&P no participó en las negociaciones con la Unión Europea acerca de la idea porque eso representaría un potencial conflicto de interés, dijo Moritz Kraemer, director gerente de calificaciones soberanas EMEA, durante un panel de discusión en el Foro Alpbach de economía.
Austria. Una emisión común de bonos por parte de los países de la zona euro recibiría la calificación de miembro más débil si fuera garantizada conjuntamente, dijo el sábado el director de calificaciones para Europa de Standard & Poor's.
S&P no participó en las negociaciones con la Unión Europea acerca de la idea porque eso representaría un potencial conflicto de interés, dijo Moritz Kraemer, director gerente de calificaciones soberanas EMEA, durante un panel de discusión en el Foro Alpbach de economía.
Kraemer dijo que entendía que los eurobonos conjuntos se estructurarían junto con las líneas de bonos jumbo de Alemania, en los que los Estados federales se asocian para emitir deuda y cada uno garantiza su propia parte.
"Si el eurobono es estructurado así y tenemos un criterio público entonces la respuesta es muy sencilla. Si tenemos un eurobono donde Alemania garantice el 27%, Francia, el 20% y Grecia un 2%, entonces la calificación del eurobono sería CC, que es la calificación de Grecia", sostuvo Kraemer.
"Si es conjunto y no solidaria, entonces sería el enfoque con el enlace más débil, como lo llamamos", aseveró.
Kraemer indicó que posiblemente el proceso podría estar estructurado de otra forma, aunque no dio detalles.
"No estamos en las negociaciones con la UE. No es nuestra tarea ayudar a estructurar o asesorar. No hacemos esto de nuevo para evitar un conflicto de interés", explicó.
En julio, Standard & Poor's redujo la calificación de crédito soberano de Grecia a territorio basura, bajándola a CC desde CCC, bajo el argumento de que la reestructuración de deuda propuesta por la Unión Europea pondría al país en un "default selectivo".
S&P fue la última de las tres grandes calificadoras en advertir de un default después de que líderes y bancos de la zona euro acordasen que el sector privado soportaría parte de la carga del paquete de rescate que le ofrece a Grecia más efectivo y términos más flexibles de crédito para mantenerlo a flote.