El tipo de cambio en la plaza local viene registrando constantes altibajos siguiendo el desempeño de las plazas globales, donde aumentan los temores de una nueva crisis financiera internacional.
Lima. Los exportadores de Perú se han apoyado este año en una mayor productividad para eludir el impacto de la volatilidad cambiaria que sacude a los mercados externos ante la incertidumbre global, pero perciben un sombrío panorama en el 2012 si se desata una recesión económica mundial.
El tipo de cambio en la plaza local viene registrando constantes altibajos siguiendo el desempeño de las plazas globales, donde aumentan los temores de una nueva crisis financiera internacional por los problemas de deuda en la zona euro y la debilitada economía de Estados Unidos.
"Este panorama preocupante del tipo de cambio y del mercado se contradice porque tiene efectos distintos en el crecimiento de
las exportaciones, que sí están teniendo un buen comportamiento, (pero) el problema es que estos efectos son sorpresivos", dijo Carlos González jefe de estudios económicos del gremio que agrupa a los exportadores del país (ADEX).
González estimó que pese al incierto panorama externo, el valor de las exportaciones en Perú crecería en torno a un 30% este año, a unos US$46.000 millones.
El sol acumula una ganancia cercana al 3 por ciento en lo que va del año, a pesar de la volatilidad en los mercados cambiarios y sobre la base del crecimiento sostenido de la economía local por una contundente demanda interna.
La apreciación de la moneda peruana, que ha sido una de las más moderadas en Latinoamérica en los últimos años, contrasta con la depreciación que registran este año otras divisas como el real de Brasil y el peso chileno.
El aumento de las exportaciones de Perú, un gran productor de materias primas, se sustenta en la demanda firme de países como China, que se ha convertido en el motor de la economía mundial y vital cliente de productos básicos.
"En la práctica el impacto de la apreciación nominal (del sol) ha sido más que compensado por factores que han impulsado las ventas al exterior, al margen de los precios", señaló Mario Guerrero analista del Scotiabank.
Productividad y competitividad. Los factores que han blindado a las empresas exportadoras locales de un sol más fuerte respecto al dólar han sido el fortalecimiento de su productividad y competitividad.
Guerrero explicó que el volumen de las exportaciones de materias primas creció un 4,1% interanual en el primer semestre; mientras que los productos manufacturados o con valor agregado avanzaron un 20%.
En Perú, el sector exportador tiene una mayor competitividad cambiaria frente a otros países de la región debido a las menores oscilaciones del tipo de cambio, en comparación con otras monedas de Latinoamérica.
Por ejemplo, la semana pasada, en medio de expectativas ante una posible solución a los problemas de deuda en Europa, la moneda peruana se apreció en torno al 0,84%, más estable si se compara con el peso chileno que saltó un 3,62% y el real brasileño que avanzó un 2,3%.
Esto gracias a que la autoridad monetaria de Perú ha evitado cambios bruscos a través de intervenciones en el mercado.
En lo que va del año, el Banco Central compró US$2.689 millones, pero también vendió en el mercado cambiario US$1.196 millones cuando la inestabilidad de los mercados externos golpeaba a la moneda local.
Riesgos de crisis externa. Sin embargo, la incertidumbre en los mercados externos podría reducir considerablemente el valor de las exportaciones peruanas el próximo año, en caso de una menor demanda global o una desaceleración en los precios de los commodities.
"Se espera que en el 2012 se sienta el golpe de la contracción (en el valor) de las exportaciones", anotó el jefe de Estudios Económicos de ADEX.
"En la crisis del 2009, en su peor momento, significó una caída del 23% de las exportaciones, pero el año pasado hubo una importante recuperación", agregó.
Una posible caída de las ventas el próximo año afectaría a su vez a la recaudación tributaria, que en la crisis del 2009 cayó un 13,2%, en medio de un retroceso de los precios de las materias primas.
Pese al eventual golpe por una crisis global, la economía peruana no sería fuertemente vapuleada debido a que se sustenta en el continuo crecimiento de la demanda interna.
Según cálculos oficiales, la economía local crecería este año en torno al 6% y un 5,7% en el 2012.
"Perú continúa siendo atractivo para la inversión y ello favorece el influjo de capitales de largo plazo", señaló Francisco Grippa analista del BBVA Banco Continental.