Loretta Mester, dijo la Fed debería estar en condiciones de cuantificar los efectos que los cambios al financiamiento de la vivienda pueden tener en la economía en general, a fin de cumplir con su meta de una inflación estable.
La Reserva Federal aún necesita tener un mejor entendimiento sobre la forma en que los problemas del sector de vivienda podrían desestabilizar a la economía estadounidense, siete años después de la crisis desatada por el mercado hipotecario, dijo este viernes una alta funcionaria del banco central.
La presidenta de la Fed de Cleveland, Loretta Mester, dijo la Fed debería estar en condiciones de cuantificar los efectos que los cambios al financiamiento de la vivienda pueden tener en la economía en general, a fin de cumplir con su meta de una inflación estable.
"Se debe trabajar más en el nexo entre la política monetaria y política de estabilidad financiera", dijo Mester durante una conferencia sobre créditos al consumidor de la Fed de Filadelfia.
La funcionaria dijo que para ello es necesario "determinar la forma más efectiva de tratar los riesgos que surjan contra la estabilidad financiera y desarrollar modelos que puedan usarse para evaluar cómo los encargados de las políticas deberían incorporar asuntos de estabilidad financiera en la toma de decisiones de política monetaria".
Mester agregó que las denominadas herramientas macroprudenciales, como los colchones de capital contracíclicos, los colchones de conservación de capital y los escenarios de pruebas de solvencia "son prometedores" pero "en general no han sido probados".
Un colapso en el mercado de hipotecas de Estados Unidos, créditos apalancados imprudentemente, la securitización realizada en Wall Street y regulaciones laxas llevaron a la crisis financiera de 2007-2009 que desencadenó en una grave recesión global.
La economía estadounidense sigue en recuperación, aunque Mester dijo que las mejoras en las hojas de balance de vivienda "son uno de los fundamentos más importantes subyacentes al panorama para la expansión continua, a fin de garantizar más avances en los mercados laborales, y para que la inflación se mueva gradualmente a la meta de 2% de la Reserva Federal en el mediano plazo".