Noel Álvarez, presidente de la entidad venezolana, señaló que "El mejoramiento de la calidad de vida de los venezolanos, pasa por el hecho de tener a trabajadores con un empleo digno y decente que les permita cubrir sus necesidades (...)".
El presidente de Fedecámaras, Noel Álvarez, dijo que la mejor medida para proteger el salario de los empleados es frenar la inflación, en aras de preservar el poder adquisitivo de los venezolanos, y que para ello es indispensable incrementar la oferta de bienes y servicios en el país, durante el Consejo Nacional que realizó ayer la cúpula empresarial.
Con respecto a la Ley de Costos, Precios y Protección del salario que creará el Presidente Chávez vía Habilitante, Álvarez recordó que en gobiernos pasados se puso en práctica la Conacopresa, cuyos resultados fueron un fracaso y ahora se pretende reactivar.
"El mejoramiento de la calidad de vida de los venezolanos, pasa por el hecho de tener a trabajadores con un empleo digno y decente que les permita cubrir sus necesidades. También pasa por el hecho de tener empresas sólidas que puedan generar nuevos puestos de trabajo", dijo el presidente de Fedecámaras.
Álvarez lamentó que el Gobierno arremeta todos los días contra la empresa privada, y reiteró que el gremio "está dispuesto a concertar y sentarnos en una mesa de diálogo, por encima de las profundas diferencias que tengamos sobre la manera como se manejan las políticas económicas".
El vocero de los empresarios puso en duda que el gobierno sea capaz de generar 3 millones de empleos sin el apoyo del sector privado, por lo que reiteró que el Ejecutivo tiene que darle estimulo al aparato productivo, recuperar las 6.000 industrias que se han cerrado en los últimos años, así como las tierras que se han visto afectadas por las tomas indiscriminadas.
"El sector empresarial está dispuesto a concertar con todos los sectores sociales para mejorar las condiciones de vida de los venezolanos. No sé cómo el gobierno va a lograr la Misión Vivienda, la Misión Empleo, si sigue empeñado en arremeter contra las empresas y no permite la participación del sector privado", dijo.
Álvarez calificó como "apresurada" la decisión del Gobierno sobre el pago de bonos de alimentación a todas las empresas, aunque tengan menos de 20 empleados. "La medida tendrá un fuerte impacto sobre todo para las Pymes, para las cuales el incremento en costos por nómina podría llegar incluso a 50%. No se dio ni siquiera un margen de espera. Esta medida puede conllevar a cierres de empresas y reducción de nóminas. Se han debido al menos estudiar unos mecanismos para que fuera de una manera escalonada y no de forma imprevista y en un solo tramo", explicó.
El vocero gremial cree que es determinante establecer una verdadera política integral en materia laboral y de salarios, a través del diálogo social.