Colombia se enfrenta a riesgos externos adversos que están generando "fuertes vientos desfavorables", advierte FMI.
El Directorio Ejecutivo del Fondo Monetario Internacional (FMI) aprobó un nuevo acuerdo por dos años a favor de Colombia en el marco de la Línea de Crédito Flexible (LCF) por 5.450 millones de dólares, cuya naturaleza es de uso precautorio.
"Colombia tiene una trayectoria de marcos de política muy sólidos, que incluyen un régimen de metas de inflación, un tipo de cambio flexible, una supervisión y regulación del sector financiero eficaz y una política fiscal basada en la regla del balance estructural", explicó el subdirector gerente de la institución, David Lipton.
Según indicó, las autoridades colombianas están firmemente comprometidas a mantener estas políticas y a adoptar iniciativas adicionales para fortalecer la resistencia de la economía, impulsar la competitividad y promover un crecimiento inclusivo en el país.
La nueva línea de crédito sustituye a otra similar que en 2011 Colombia y el FMI acordaron por valor de 5.840 millones de dólares, que ha caducado este año.
La LCF, una especie de seguro al que pueden recurrir los países suscriptores en momentos de emergencia, proveerá a Colombia con una protección contra riesgos externos, a petición de Bogotá.
"Las políticas macroeconómicas aplicadas por Colombia le han dado flexibilidad para mitigar el impacto de la reciente caída de los precios internacionales del petróleo", agregó además el subdirector gerente del FMI.
No obstante, Lipton advirtió de que Colombia se enfrenta a riesgos externos adversos que están generando "fuertes vientos desfavorables" que de llegar a materializarse podrían afectar la posición externa del país.
"El acceso a la LCF del FMI seguirá brindando un importante apoyo a las políticas de las autoridades bajo la presencia de estos riesgos a la baja", añadió.
La LCF es un instrumento creado el 24 de marzo de 2009 que se encuentra a disposición de países miembros del FMI con fundamentos económicos, políticas y un historial de aplicación de políticas sólidas.
El acceso a un acuerdo en el marco de la LCF depende de que el país solicitante reúna ciertos criterios preestablecidos. Los desembolsos no están condicionados al cumplimiento de metas específicas de política económica o de criterios cuantitativos.