Poul Thomsen, jefe del Departamento Europeo del FMI, dijo que el potencial de crecimiento económico del centro y este de Europa se había reducido a la mitad en la última década y que la rápida marcha de trabajadores cualificados es un lastre creciente.
Las economías emergentes de Europa afrontan crecientes presiones que amenazan con echar por tierra parte de los progresos políticos logrados en las últimas décadas, dijo el martes un alto funcionario del Fondo Monetario Internacional.
Poul Thomsen, jefe del Departamento Europeo del FMI, dijo que el potencial de crecimiento económico del centro y este de Europa se había reducido a la mitad en la última década y que la rápida marcha de trabajadores cualificados es un lastre creciente.
Añadió en una conferencia en Dubrovnik que algunos gobiernos de la región están incluso cuestionando los beneficios de la integración europea.
Con las dificultades económicas y la crisis que ha atravesado Europa en los últimos años, la convergencia entre los países occidentales del bloque y la periferia del este se ha ralentizado o frenado. Ello ha planteado dudas sobre la validez de reformas económicas y políticas dolorosas.
"Es un oportuno recordatorio para todos de que no nos engañemos al creer que el progreso institucional y de gobernanza es inevitable; a no creer que tal progreso es un resultado imparable, una evolución sostenida. No lo es", dijo Thomsen. "A medida que se avance, el viento en contra será más fuerte", dijo el economista danés.
Thomsen, que ha encabezado los programas del FMI para países como Grecia y Portugal, señaló también que era improbable que fuera a reproducirse el apoyo excepcional por un panorama global de crecimiento que benefició a la región cuando salió del comunismo.
Mientras, la salida de trabajadores cualificados hacia el oeste de Europa es un tema clave para la región. El FMI estima que 20 millones de personas han dejado el este y centro de Europa en las últimas décadas, aproximadamente entre un 5% y 6% de la población.
En el plano político, Thomsen dijo que las crecientes tensiones entre algunos miembros del este de la UE y la Comisión Europea eran un asunto clave. El bloque está enfrentado con Polonia por algunas infracciones de la ley y ha chocado con Hungría por temas de refugiados, entre otros asuntos.