Director del FMI alertó sobre señales negativas como el aumento de la inflación, el rápido crecimiento logrado a través del crédito y el auge de los mercados de valores. Aseguró que la mejor fórmula para avanzar es impulsar reformas a favor de la productividad.
Washington. Una serie de consejos envió el director gerente del Fondo Monetario Internacional (FMI), Dominique Strauss-Khan, a América Latina para aprovechar el período de "vacas gordas" que vive gran parte de la región promoviendo para ello una serie de reformas en pro de mejorar la productividad.
Según señala el diario El Universal, Strauss-Khan indicó que "es indudable que las reformas que impulsan el crecimiento de la productividad, como la revitalización de la infraestructura y las mejoras en la educación y la capacitación, resultan fundamentales".
"La mejora del clima empresarial y el fortalecimiento de la gobernabilidad también son elementos importantes en una estrategia que favorezca el crecimiento", puntualizó a través de su blog.
Añadió que "el crecimiento por sí mismo no es suficiente", pues dijo subsiste un alto nivel de pobreza en la región que afecta a la tercera parte de los habitantes de la zona.
Para el personero, la región ha vivido una "transformación, pero aún no ha concluido".
La cabeza del organismo internacional alista las malestas para visitar la próxima semana Panamá, Uruguay y Brasil.
En su llamado, también alertó sobre señales negativas, "están surgiendo señales de recalentamiento que podrían resultar preocupantes: el aumento de la inflación, el rápido crecimiento del crédito y el auge de los mercados de valores", apuntó.
Por ello, dijo, el principal reto es un "aterrizaje suave".
Recomendó que "de cara al futuro, los países deberían recomponer el espacio fiscal perdido, y de hecho, ir más allá, cuando sea necesario, para disminuir sus deudas a niveles que sean seguros".
Otra medida que apuntó es encontrar "mejores instrumentos para vigilar los riesgos, tanto dentro de las instituciones como entre ellas. Los organismos de regulación y supervisión deben estar facultados para adoptar medidas preventivas tempranas".
"Los líderes de toda la región deben capitalizar al máximo las actuales condiciones favorables, haciendo que la transformación de sus países vaya un paso más allá, y así asegurar que los beneficios del crecimiento sean compartidos ampliamente en sus sociedades", acotó.