Los jefes de las dos instituciones dijeron que poner bajo control al nuevo coronavirus era un requisito para revitalizar la economía mundial, y es crítico para alcanzar el equilibrio adecuado de los gastos en emergencia.
Washington. El FMI y la Organización Mundial de la Salud llamaron este viernes a los líderes de las economías en desarrollo a priorizar los gastos en personal médico, la compra de implementos de protección y otros desembolsos del segmento sanitario para responder a la pandemia de COVID-19.
En una columna conjunta divulgada en el diario británico Telegraph, los jefes de las dos instituciones dijeron que poner bajo control al nuevo coronavirus era un requisito para revitalizar la economía mundial, y es crítico para alcanzar el equilibrio adecuado de los gastos en emergencia.
"Nuestro principal llamado a las autoridades, especialmente de naciones de economías emergentes y en desarrollo, es para que reconozcan que proteger la salud pública y llevar a las personas devuelta a sus trabajos van de la mano", escribieron la directora gerente del Fondo Monetario Internacional (FMI), Kristalina Georgieva, y el director de la OMS, Tedros Adhanom Ghebreyesus.
"En momentos en que se requiere apoyo a los presupuestos públicos severamente diezmados para las naciones, nuestro pedido común es poner al gasto en salud en el tope de la lista de prioridades", sostuvo.
Los jefes de la OMS y la FMI también destacan el llamado conjunto con el Banco Mundial para aliviar la carga de deuda de las naciones más pobres, una medida que no ha sido respaldada aún por el grupo de las economías desarrolladas del G-20.
Más de 1 millón de personas se han infectado con el COVID-19, la enfermedad que causa el nuevo coronavirus, y más de 53.000 personas han perdido la vida, de acuerdo a un conteo de Reuters hasta el viernes.
Georgieva y Tedros dijeron que los gastos en salud son críticos para proteger a las personas ante la pandemia y deberían acompañarse con iniciativas para reducir el desempleo, minimizar las quiebras de empresas y sostener a economías devastadas por las cuarentenas generalizadas.