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Francia insiste que eurobonos solucionarían la crisis
Lunes, Mayo 21, 2012 - 10:22

Altas autoridades de la UE y Estados Unidos dijeron que el nuevo presidente francés reactivó la idea de los bonos conjuntos respaldados por todos los estados de la zona euro durante el encuentro del G-8.

Bruselas. El presidente francés, Francois Hollande, impulsará una propuesta de mutualizar la deuda europea en una cumbre informal de líderes de la Unión Europea en Bruselas esta semana, aumentando la presión sobre la canciller alemana, Angela Merkel, para que abandone su oposición a la idea.

Altas autoridades de la UE y Estados Unidos dijeron que el nuevo presidente francés reactivó la idea de los bonos conjuntos respaldados por todos los estados de la zona euro durante el encuentro del G-8 el fin de semana y que volverá a presentarla cuando se reúnan los líderes de la UE en Bruselas el miércoles.

Se espera que Hollande tenga un fuerte apoyo del primer ministro italiano, Mario Monti, el presidente del gobierno español, Mariano Rajoy, y de la Comisión Europea, que hace tiempo apoya la emisión de eurobonos.

Alemania se opone a adelantar la medida y dice que antes se necesita mucho más progreso en la coordinación de las políticas fiscales en toda la zona euro. Para ello, tiene el apoyo de Holanda, Finlandia y otros.

El rápido deterioro de la crisis de deuda el mes pasado, por

el tabú de una posible salida de Grecia del bloque monetario de 17 países, ha revivido la idea, con varios economistas y autoridades que argumentan que sería una de las mejores formas de recuperar la confianza del mercado.

"El debate de los eurobonos ha vuelto a la palestra y Hollande tendrá el apoyo de otros líderes si lo presenta", dijo un funcionario de la UE. "No es algo que vaya a ocurrir de la noche a la mañana, hay mucho que necesita ponerse en su lugar primero, pero hay un deseo de un plan de acción hacia los eurobonos", agregó.

En una carta a los líderes de la UE, el presidente del Consejo Europeo, Herman Van Rompuy, les exhortó a no tener "tabúes" en la cumbre del miércoles, que debería enfocarse en medidas específicas para estimular el crecimiento y crear empleos en todo el bloque.

"No es demasiado pronto para pensar en el futuro y reflejar más posibles cambios fundamentales", escribió. "De varias formas, la perspectiva de avanzar hacia un sistema más integrado debería aumentar la confianza en el euro y la economía europea", añadió.

El primer ministro eslovaco, Robert Fico, le dijo a sus parlamentarios el lunes que apoyaría la posición de Francia.

Se espera que las propuestas de crecimiento incluyan un aumento en el capital pagado del Banco Europeo de Inversiones (BEI) y planes de "bonos de proyecto" respaldados por el presupuesto de la UE para financiar infraestructura. El objetivo es acordar ideas que puedan suscribirse formalmente en la siguiente cumbre de líderes de la UE el 28 y 29 de junio.

La victoria del Partido Socialista de Hollande en Francia no sólo cambió la dirección del debate sobre la crisis de la zona euro hacia el crecimiento, sino también le dio un impulso renovado a las ideas que Merkel ha rechazado en el pasado, como la mutualización de la deuda.

Merkel ha dicho que no se opone al principio de los bonos conjuntos de la zona euro, pero cree que sólo puede discutirse una vez que se esté mucho más cerca de la integración económica y fiscal en la zona euro.

Ese objetivo sigue estando lejos y las autoridades germanas reiteraron rápidamente ese punto el lunes.

Los eurobonos son "la receta errada en el momento equivocado con los efectos secundarios equivocados", dijo el viceministro de Finanzas alemán, Steffen Kampeter, a una radio alemana.

Grecia tendrá elecciones el 17 de junio, las que podrían apresurar su salida de la zona euro si los votantes apoyan a partidos opositores al rescate.

En ese escenario, Merkel se vio presionada en la cumbre del Grupo de las Ocho potencias mundiales (G-8) en Camp David, Estados Unidos, pero se negó a ceder en su insistencia de que las medidas de crecimiento no pueden provenir de más gasto deficitario.

Sin su venia, no se podrán realizar grandes cambios de política económica.

Autores

Reuters