Los ministros de finanzas y jefes de bancos centrales de las principales economías del mundo, reafirmaron en la declaración final "la necesidad de más diálogo y acciones (...) para fortalecer la contribución al comercio de nuestras economías".
Buenos Aires. Los líderes financieros de las principales economías del mundo reafirmaron este martes su compromiso de combatir el proteccionismo y de reconocer la necesidad de "más diálogo y acciones" comerciales, días antes de que entren en vigencia los aranceles de Estados Unidos al acero y el aluminio.
Los ministros de finanzas y jefes de bancos centrales del G-20 discutieron en una cumbre en Argentina los riesgos que representa para el crecimiento de la economía mundial una potencial guerra comercial provocada por los aranceles de Estados Unidos y las crecientes sanciones a China.
La declaración final del encuentro incluyó una frase que no estaba en el escrito inicial y que enfatiza la necesidad de un mayor diálogo en asuntos comerciales.
"El comercio internacional y la inversión son importantes motores de crecimiento, productividad, innovación, creación de trabajo y desarrollo", señaló el comunicado conjunto.
Muchos miembros del G-20 se esforzaron en la reunión para preservar los términos de la Cumbre de Hamburgo de julio de 2017, que fue firmada por el presidente estadounidense, Donald Trump y decía que los países "seguirán luchando contra el proteccionismo, incluyendo prácticas comerciales injustas".
La declaración de Hamburgo también señaló que los líderes del G-20 "reconocen el rol de los instrumentos comerciales de legítima defensa", una ambigüedad que permite a Estados Unidos un argumento para sostener sus aranceles. Esa medida de Trump se basa en una ley de seguridad nacional de la Guerra Fría.
El nuevo lenguaje utilizado por el G-20 sobre la necesidad de diálogo comercial se da en momentos en que Estados Unidos planea castigar a China con aranceles por sus prácticas relacionadas a la propiedad intelectual.
En su declaración final, el G-20 mantuvo su tradicional compromiso de evitar devaluaciones competitivas pero incluyó nuevos términos en relación a los tipos de cambio.
"Fundamentos fuertes, políticas sólidas y un sistema monetario internacional resistente son esenciales para la estabilidad de los tipos de cambio, contribuyendo a un crecimiento y una inversión robustos y sostenidos", señaló.
"Los tipos de cambio flexibles, donde sean posibles, pueden servir para absorber sacudidas", agregó.