Gabriela Ramos, jefa de Gabinete de la OCDE, explicó que “un resultado importante de la cumbre del G20 en Sydney, fue el acuerdo de tomar las acciones necesarias para elevar el PIB de sus naciones en los próximos cinco años”.
Excelsior.com.mx Los ministros de finanzas y gobernadores de bancos centrales del G20 llegaron al acuerdo histórico en su reunión del 22 y 23 de febrero en Australia, para mantener la sostenibilidad fiscal, la estabilidad financiera y elevar la tasa de crecimiento en 2% adicional en sus economías, las cuales concentran 90% del Producto Interno Bruto (PIB) mundial.
Gabriela Ramos, (líder) de los trabajos del G20 y jefa de Gabinete de la OCDE, explicó que “un resultado importante de la cumbre del G20 en Sydney, fue el acuerdo de tomar las acciones necesarias para elevar el PIB de sus naciones en los próximos cinco años”.
Ministros y gobernadores acordaron desarrollar una agenda ambiciosa, pero realista, con el propósito de elevar en 0,5 puntos porcentuales promedio anual hasta 2018, lo que significará añadir a la economía más de US$2 billones en términos reales y añadir significativamente más empleos.
Causa-efecto
“Este compromiso se basó en nuestros análisis relacionados con las ganancias de las reformas estructurales (competencia, empleo, innovación, educación, infraestructura, impuestos), y en la cuantificación que hemos hecho a lo largo de los años del impacto que tienen estas reformas en el crecimiento económico”, precisó Ramos.
“Esta discusión es importante porque las perspectivas de crecimiento en el momento actual son decepcionantes por muchas razones, entre ellas, un crecimiento de la inversión y del comercio internacional por debajo de sus niveles antes de la recesión global, un ritmo bajo de créditos de la banca, particularmente en Europa, así como un crecimiento menor de las economías emergentes, particularmente de los BRICS.”
“A la situación de que los motores del crecimiento que todavía no marchan al 100 por ciento se deben añadir los legados de la crisis en términos de altos niveles de desempleo y endeudamiento, particularmente en las economías avanzadas, altos niveles de desigualdad en todos los países G20, lo que dibuja un panorama que no es alentador”, añadió.
“Por ello, es importante que los países G20 tomen las medidas más ambiciosas para poder liberar el crecimiento y superar las perspectivas actuales”, dijo.
Expuso que la discusión de estas metas también se dio en el contexto de la discusión sobre la normalización de la política monetaria en EU y su impacto en los países en desarrollo.
“Ha habido descontento en varios de los más afectados por el “tapering” (Turquía, India, Brasil, Indonesia), dado que la reducción de compra de bonos con la posibilidad de alza en las tasas de EU ocasiona una salida de capitales importantes en esos países”, subrayó.
“El segundo resultado más importante de la cumbre del G20 fue la adopción del estándar sobre intercambio automático de información fiscal elaborado por la OCDE, y el llamado del grupo para que este sea adoptado por todos los centros financieros internacionales
“Este logro es muy importante, ya que estandariza los intercambios alineándolos a los niveles más exigentes y lo establece de manera global.
“Se llama al Foro Global, que la OCDE hospeda, a revisar su correcta implementación, y se pide a todos los países que se unan a la Convención Multilateral en materia fiscal para poder avanzar en el monitoreo y seguimiento”, agregó.