"Forma parte del análisis meticuloso que nosotros tenemos que asociar a cada contrato y el incumplimiento del mismo", confirmó Jorge Capitanich.
Buenos Aires. El jefe de gabinete del gobierno argentino, Jorge Capitanich, reveló que el Ejecutivo estudia la posibilidad de cambiar de banco para pagar a los acreedores de deuda reestructurada.
"Forma parte del análisis meticuloso que nosotros tenemos que asociar a cada contrato y el incumplimiento del mismo", confirmó Capitanich durante su rueda de prensa diaria tras ser preguntado sobre si el gobierno se plantea cambiar de banco para realizar el pago.
El gobierno de Cristina Fernández realizó el pasado jueves el depósito correspondiente al pago de la deuda a los bonistas que aceptaron los canjes de deuda planteados por el Estado en 2005 y 2010 -el 92% del total-, pero el desembolso no ha llegado a los tenedores porque fue declarado "ilegal" por la Justicia estadounidense.
El Bank of New York no pagó a los acreedores de deuda reestructurada debido a una decisión del juez neoyorquino Thomas Griesa, que dictó el fallo adverso a Argentina en el litigio con un grupo de fondos especulativos que denunciaron al país suramericano para cobrar el importe íntegro de la deuda (que representan el 1% del total).
Dicho fallo impone que Argentina debe cumplir primero con los US$1.300 millones que debe a los fondos litigantes si quiere hacer efectivo el compromiso con el resto de acreedores, que vencía este lunes.
Representantes del Estado argentino viajarán el próximo día 7 para reunirse con el mediador designado por Griesa y tratar de avanzar en las negociaciones con los llamados "fondos buitre", así como para desbloquear el pago al resto de acreedores antes de que se cumpla el plazo de gracia de 30 días que tiene Argentina para evitar la suspensión de pagos.
Capitanich anunció que la composición de delegación que viajará a Nueva York se definirá "en el transcurso de esta semana".