En el día en que el presidente Mauricio Macri se reúne con Trump en Nueva York, en Argentina una huelga "trata de poner freno" a sus reformas económicas y "expresa el descontento social y la pérdida de confianza en el gobierno". El Gobierno prevé millonarias pérdidas económicas.

Buenos Aires. Este martes se dio inicio al cuarto paro general que sufre el gobierno de Mauricio macri en Argentina. La paralización se da un día despues de una jornada de marchas, con la que suman 36 horas de protestas continuas contra el Ejecutivo.

El gobierno de Argentina estimó que el paro general convocado por la Confederación General del Trabajo (CGT) reportará pérdidas económicas para este país por el orden de los 31.600 millones de pesos (más de US$831 millones).

El Ministerio de Economía indicó que el monto equivale a un 0,2% del Producto Bruto Interno (PBI), siendo los sectores más afectados la industria, la construcción y el comercio mayorista y minorista.

"El estimado está basado en el Estimador Mensual de Actividad Económica (EMAE). Se miró el valor agregado que aporta y cuánto pesa cada industria en la economía. Por ejemplo, el paro en trasporte y construcción será total; en industria, parcial; al agro no lo afecta", reseñó un comunicado de la cartera económica.

El paro de 24 horas también prevé que afecte significativamente al sector público a través de una menor recaudación de impuestos "lo que impacta en el balance de ingresos y gastos del gobierno nacional", indicó el ministerio.

La medida de fuerza es la cuarta de su tipo convocada desde la llegada al gobierno del presidente Mauricio Macri.

La CGT que reúne a diversos sindicatos argentinos mantiene dentro de sus petitorios un cambio de rumbo económico a su vez que rechazan las negociaciones que actualmente el gobierno mantiene con el Fondo Monetario Internacional (FMI).

Dentro de las exigencias de los trabajadores se encuentra el establecimiento de un pacto anti-despidos, la reapertura de negociaciones sobre las tablas salariales (paritarias) ante la inflación y la devaluación del peso y un aumento de las pensiones.

Asimismo, piden que las tarifas de los servicios públicos no se alineen al alza del dólar, y rechazan los recortes al presupuesto del sector educativo.

Al paro se sumaron cerca de 20 gremios dentro de los que se incluyen camioneros, empleados de transporte público, mecánicos, metalúrgicos, trabajadores bancarios, gastronómicos, de la industria textil y calzado, pasteleros, y del sector salud.

De igual manera no trabajarán las estaciones de servicio, los peajes, el servicio de recolección de basura, ni el sector comercial.

Desde las 7:00 de la mañana, hora local, se producen cortes de calle y pequeñas manifestaciones, que impiden el tránsito desde el conurbano a la Capital Federal.

*Con información de Clarín y Xinhua.