Hasta el año 2011, las ventas desde Colombia a paraísos fiscales fueron estimadas en 11,4 billones de pesos (US$5.500M).

Ante el creciente fraude tributario que cometen la mayoría de empresas multinacionales que erosionan la base tributaria del país, el gobierno del presidente Santos puso en marcha un convenio con varios países del mundo y con la asesoría de la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico (OCDE).

El ministro de Hacienda, Mauricio Cárdenas, explicó que con el convenio conocido como Erosión de la Base Gravable y el Traslado de Beneficios (BEPS), se busca poner restricción a las empresas de una práctica “de la que se estaba abusando” y que consiste en generar unos elevados niveles de endeudamiento ficticios para que eso generara a su vez un costo que es el pago de los intereses y el servicio de esa obligación, “erosionando por completo la base gravable” y reduciendo los impuestos en Colombia.

Con esta práctica se permite a las multinacionales que trasladen las utilidades, vía el pago de intereses, a las casas matrices o a las filiales en los paraísos fiscales. “Nosotros le pusimos a eso un dique”, dijo el ministro de Hacienda, al explicar que le han dicho a las empresas que si tiene un peso de capital, máximo puede registrar dos de deuda.

El director de la Dian, Juan Ricardo Ortega, indicó que un ejemplo elemental de la erosión de una base tributaria consiste en la compra de un medicamento que en Colombia se vende a 100 euros la caja, en Francia se consigue a 20 euros, pero las empresas que lo vende en el mercado local, no tienen utilidades. “Muchos de los medicamentos en Colombia tienen esa característica”, reiteró Ortega. Casos de erosión tributaria también se presentan en el sector minero.

Ortega mencionó el caso de las compras por internet que ascendieron a cinco billones de pesos, muchas de ellas hechas en el exterior. “Hoy en día esas compras le hacen competencia desigual a empresas que pagan impuestos en Colombia”, alertó el director de la Dian.

Juan Ricardo Ortega explicó que recientemente se realizó una reunión con las administraciones tributarias de América Latina y se acordó fortalecer y volver más dinámico los temas de intercambio automáticos de información, “ese es uno de los retos más grandes”.

Para Ortega es importante que los contribuyentes sepan que gracias a las gestiones del ministerio de Hacienda, con el aval de la Corte Constitucional, opera “la comisión multilateral que nos garantiza intercambio de información con 70 jurisdicciones”.

Este tipo de intercambio arranca en el mes de abril con Estados Unidos de manera dinámica y recíproca, dijo el director de la Dian.

Ortega insistió que las ventas que se hacen de Colombia a países fiscales son muy altas. Hasta el año 2011, las ventas desde Colombia a paraísos fiscales fueron estimadas en 11,4 billones de pesos.

El ministro de Hacienda explicó que ahora las empresas con representación en Colombia se están cuidado más, pero sigue siendo un problema en materia tributaria. Explicó que “lo más novedoso es que muchas veces esas mismas empresas tienen en Colombia un capital muy delgado, y aparecen muy endeudadas con su casa matriz o con la filial de esa casa matriz en un paraíso fiscal”.

Insistió en que una parte muy importante de los costos que reportan en Colombia tiene que ver con el pago del servicio de la deuda a esas filiales o casa matriz y esa es la forma sacar las utilidades sin pagar impuestos. Cárdenas recordó que esta situación se metió en cintura con la reforma tributaria mediante la aprobación de limitar el nivel de deuda de las empresas: hay una proporcionalidad 33% capital 66% deuda, “el que se pase de allá no se le reconoce como gasto esos intereses”, dijo el ministro.

“Esto de ponerle un tope al endeudamiento, a lo que se puede descontar como gasto, por el servicio de la deuda es algo que están empezando a notar las empresas. Estas eran prácticas de erosión de la base gravable o de traslado de impuestos”, dijo el ministro de Hacienda recordando que la no aprobación de esta norma, habría impedido desmontar los impuestos a la nómina.

El director de la Dian destacó que estas acciones que evitarán la erosión de la base tributaria se manifiesta con las buenas cifras de recaudo que sigue registrando el país. En lo corrido del año, el recaudo tributario supera los 30 billones de pesos, dijo.