El Ejecutivo mantiene metas de crecimiento de largo plazo pero redujo expectativa para 2015.

Con el dato de Producto Interno Bruto (PIB) del tercer trimestre menos auspicioso de lo esperado recién sacado del horno, el equipo económico se mostró confiado en sostener la senda de crecimiento a futuro, pese al mayor pesimismo que reina entre los analistas privados sobre la sustentabilidad de esas metas fijadas para el quinquenio en curso. De todas maneras, los responsables de la política económica reconocieron que la actividad crecerá medio punto por debajo del 2,5% establecido en el Presupuesto y que el déficit fiscal cerrará el año levemente por encima de lo previsto.

Como es tradicional al cierre de cada año, el foro organizado por la Asociación Cristiana de Dirigentes de Empresas (ACDE) denominado "La economía uruguaya: avances logrados y agenda futura", sirvió para que el equipo económico de gobierno repasara los principales temas que ocupan la agenda.

El director de la Asesoría Macroeconómica del Ministerio de Economía y Finanzas, Andrés Masoller, calificó como una "buena noticia" el desempeño que mostraron durante el tercer trimestre algunos sectores claves de la economía, como el agro. Además, dijo que el comercio, uno de los sectores de peso que cayó entre julio y setiembre, lo hizo a menor ritmo que en el segundo tercio del año. "Lo peor del impacto internacional ya ocurrió", afirmó.

El jerarca destacó la posición de Uruguay respecto a los países de la región, que se están viendo obligados a "ajustar" a la baja sus proyecciones de crecimiento económico. Aunque dijo que las proyecciones de largo plazo ahora indican que la economía uruguaya crecería a una tasa de 3% anual (antes era de 4%), Uruguay se ha diferenciado en la última década con tasas por encima de la media de América Latina.

En una línea similar, el ministro de Economía y Finanzas, Danilo Astori, valoró el dato interanual de crecimiento de sectores "muy relevantes" en la base productiva del país y sostuvo que, aunque la economía se desaceleró, lo positivo "es que el país sigue creciendo". El gobierno espera que la actividad uruguaya se expanda 2% este año, medio punto por debajo de la estimación que se presentó cuando se elevó el proyecto de ley de Presupuesto al Parlamento. "Hay que tener en cuenta que estamos sufriendo un shock negativo", recordó Masoller. Esa estimación está por encima de la mediana de los analistas que partipan en la Encuesta de Expectativas Económicas de El Observador y que a noviembre –antes de la divulgación del dato del tercer trimestre– esperaban que la economía se expandiera a 1,7%.

Presupuesto "prudente"

Por otro parte, Masoller afirmó que el "Presupuesto da señales de prudencia en comparación con períodos anteriores", con una economía que seguirá creciendo en 2016 pese al contexto regional adverso (Brasil y Argentina), suba de las tasas de interés y baja en el precio de los commodities. "El Presupuesto se diseñó sobre una base realista, no optimista", aseguró.

En ese sentido, Astori hizo hincapié en que pese a las "circunstancias difíciles, el gobierno no se ha escondido". Puso como "prueba" los recursos "muy importantes" que se han otorgado a las prioridades del gobierno y especialmente a las de carácter social, como la educación, el sistema de cuidados, la seguridad pública, la vivienda y la salud.

Déficit mayor

No obstante, se anunció que el déficit de las finanzas públicas cerrará 2015 en 3,6% del PIB, 0,3 puntos por encima de lo que estaba previsto. "El deterioro del déficit fiscal no es solo una cuestión de Uruguay", aseguró. En ese sentido, dijo que si bien el rojo de las cuentas públicas sigue elevado, se muestra estable, con un nivel de endeudamiento manejable para cumplir con la transición de llevar el déficit a la meta de 2,5% del PIB para el final del gobierno.

Uno de los factores que impactó en la corrección fiscal fue una baja de la recaudación de 0,4% que no estaba en los planes, producto del menor dinamismo del consumo. "Este es el factor que más lleva a preocuparnos", alertó Astori. Otro efecto negativo fue la amortización de intereses por vencimiento anticipado que realizó el Banco Central con la recompra de títulos, aunque eso tendrá su efecto opuesto el próximo año. También se registró una mayor ejecución del gasto a la prevista en aproximadamente 0,2% del PIB. "La situación no es la misma que cuando elaboramos el Presupuesto", explicó.

En ese sentido, anunció que "eventualmente" se evaluarán "acciones concretas" para asegurar una trayectoria fiscal adecuada. "Es una apuesta bien ambiciosa alcanza la meta (de 2,5%)", afirmó.

El director de la Asesoría Macroeconómica dijo que el gobierno ya está trabajando para reducir el gasto discrecional que representa un tercio de los recursos públicos. Respecto al gasto endógeno –que representa los dos tercios restantes– indicó que espera que comience a crecer en línea con el PIB. Masoller destacó que los compromisos de gestión que se acordaron con las empresas públicas ya se están reflejando en los datos de déficit, producto de la reducción de costos operativos y la finalización de algunas obras, como el tendido de fibra óptica que realiza ANTEL. Añadió que se espera que las inversiones de las empresas públicas tengan una mayor rentabilidad, lo cual podría impactar en la competitividad global de la economía.

Mercado laboral y negociación

Sobre el deterioro del mercado laboral, en el gobierno preocupa la caída de 30 mil cotizantes ante el BPS y el incremento del uso del seguro por desempleo en los últimos meses. En el caso de la suba del desempleo, se valora como positivo que el incremento de la tasa no esté alcanzando, por ahora, a los jefes de hogar.

Por su parte, en relación con la marcha de la negociación salarial, el gobierno se mostró conforme con la firma del 40% de los convenios, que en su mayoría han adoptado las pautas que fijó el Ejecutivo de ajustes nominales.

El comercio y Argentina

En el gobierno se confía en que el cambio de gobierno en Argentina no solo ayudará a recomponer el flujo comercial y resolver otros asuntos bilaterales pendientes, sino también a que el país vecino sea un aliado para mejorar el funcionamiento interno del Mercosur y para impulsar acuerdos con otros bloques.

Por otra parte, el gobierno llamó a seguir trabajando para mantener el buen clima de negocios y así asegurar que se sigan teniendo "buenos números" en materia de inversión, además de seguir mejorando en instrumentos de apoyo al desarrollo productivo e innovador con instrumentos nuevos como los fondos de capital de riesgo, programas de internacionalización de empresas y capacitación de recursos para atraer inversiones.

En ese sentido, el subsecretario Pablo Ferreri destacó que se está potenciando el gobierno electrónico, se continúa con la inclusión financiera y hay más eficacia y racionalización de la burocracia pública.

Astori y la reforma de la Caja Militar

El ministro Astori definió ayer como una tarea pendiente y en la que se está trabajando la reforma de la Caja Militar, que tiene una incidencia importante en las finanzas públicas.

A modo de ejemplo, informó que el sistema de retiros y pensiones de las Fuerzas Armadas cubre a casi 50 mil personas, pero la recaudación equivale al 19% de las pasividades que paga. "Eso tiene una repercusión fiscal enorme. Este año la asistencia financiera ha llegado a US$ 315 millones", dijo el ministro.

Flexibilidad cambiaria para sortear shocks externos

El presidente del Banco Central (BCU), Mario Bergara, dijo que la economía uruguaya está navegando en un mundo cada vez más globabilizado y volátil. "Sus impactos se sienten de manera más rápida. Si hay algo que se ha recrudecido, es la volatilidad", remarcó. En ese sentido, el jerarca indicó que el equipo económico hace 11 años consecutivos que está trabajando para identificar las "vulnerabilidades" del país para atacarlas. "La economía está mejor y eso no es fruto del piloto automático", acotó Bergara. El titular del BCU identificó la "flexibilidad cambiaria" como una de las principales herramientas para asumir y amortiguar los "shocks externos" que está recibiendo la economía uruguaya. Por su parte, el director de la Asesoría Macroeconómica, Andrés Masoller, añadió que la caída en los precios externos se viene produciendo de forma gradual. "Todos los costos internos de las empresas medidos en dólares han caído", aseguró. Agregó que esto también alcanzó a los salarios corregidos por productividad medida en dólares.

El jerarca calificó como un "error muy grande" acompañar la depreciación del real frente al dólar en Brasil. Dijo que hay que ver "los fundamentos" que están detrás de una economía brasileña que está en recesión y que se espera continúe en esa senda el próximo año, mientras que Uruguay aun se mantiene en la senda del crecimiento.