La recompra de la deuda significa, además de disminuir los intereses, generar un clima de confianza internacional, mejorando el perfil de la misma.
La norma, con fecha 2 de septiembre de 2010, expresa que el Poder Ejecutivo procura gestionar la deuda con el propósito de optimizar su composición y estructura de vencimientos.
Asimismo, el gobierno estima conveniente continuar con la línea trazada a fines de 2007, cuando también autorizó, el 3 de diciembre de ese año, “la compra de títulos de deuda emitidos por la República bajo la ley extranjera y la le uruguaya por hasta US$ 500 millones”.
El Banco Central del Uruguay llevará adelante los procedimientos pertinentes para hacer efectiva la operación.