El primer ministro griego, Alexis Tsipras, pidió en un discurso ante el Parlamento Europeo un acuerdo justo, reconociendo la responsabilidad histórica de Grecia en la actual crisis.
Estrasburgo/Bruselas. Una carrera para salvar a Grecia de la bancarrota y mantenerla en la zona euro tomó impulso este miércoles cuando Atenas solicitó formalmente un préstamo de tres años y las autoridades europeas lanzaron una revisión acelerada del pedido.
El primer ministro griego, Alexis Tsipras, pidió en un discurso ante el Parlamento Europeo un acuerdo justo, reconociendo la responsabilidad histórica de Grecia en la actual crisis, después de que los líderes europeos le dieron cinco días para presentar reformas convincentes.
El Gobierno griego presentó el pedido al fondo de rescate del Mecanismo Europeo de Estabilidad Financiera para prestar una cantidad no especificada de dinero, que será usado para "cumplir con las obligaciones de deuda de Grecia y asegurar la estabilidad del sistema financiero".
Atenas se comprometió a comenzar a implementar medidas impositivas y de pensiones que pretenden los acreedores tan pronto como el lunes.
Con sus bancos cerrados, el retiro de dinero racionado y la economía en caída libre, Grecia nunca estuvo tan cerca de una bancarrota, que podría obligarle a acuñar una moneda alternativa y abandonar el euro.
Pese a todo, el primer ministro izquierdista pareció relajado y confiado, con una nota de humildad, cuando compareció ante los europarlamentarios en Estrasburgo, en medio de ovaciones y abucheos aislados.
Horas después de que los líderes de la zona euro, en otra cumbre de emergencia en Bruselas, dieron a Grecia hasta el fin de semana para presentar propuestas de reformas de largo alcance, Tsipras dijo que los griegos no tienen más opción que pedir una salida de "este punto muerto".
El jefe del grupo de ministro de Finanzas de los 19 países que componen la zona euro, Jeroen Dijsselbloem, le pidió a la Comisión Europea y al Banco Central Europeo que evalúen el pedido de préstamo, estudien la sostenibilidad de la deuda griega y aquilaten si Grecia plantea un riesgo para la estabilidad financiera de la zona euro.
Financiamiento de emergencia. Así, se busca que los ministros del Eurogrupo que se reunirán el sábado estén en posición de recomendar un préstamo, y algunos puentes de financiamiento de emergencia, que aprobaría una cumbre de los 28 líderes de la UE el domingo si están satisfechos con los compromisos de reforma griegos.
Ese es un gran "si", debido a los antecedentes de Atenas y porque muchas de las medidas de liberalización que requieren van en contra de la ideología del partido de Tsipras, Syriza.
Tsipras prometió entregar propuestas detalladas de reformas el jueves y evitó en general la retórica furiosa que ha alienado a muchos de sus socios, pero criticó intentos por "aterrorizar" a los griegos para que aceptaran una "austeridad interminable".
El presidente del Consejo Europeo, Donald Tusk, reiteró que el plazo final para que Grecia envíe planes de reforma convincentes y comience a implementarlos se cumple esta semana.
"Nuestra incapacidad de hallar un acuerdo podría llevar a la bancarrota de Grecia y la insolvencia de su sistema bancario", dijo Tusk. "Y, por supuesto, habrá más dolor para el pueblo griego".
"No tengo duda de que esto afectará a Europa, también en el sentido geopolítico. Si alguien tiene la ilusión de que no, es un inocente", declaró.
En la agitada cámara, algunos diputados levantaron carteles con la palabra "OXI" -"No" en griego- para apoyar el rechazo de los griegos a una mayor austeridad, mientras miembros de la extrema derecha alabaron al gobierno izquierdista por plantar cara a lo que muchos denominaron la "oligarquía" europea.
Antes, Grecia debería pasar una primera ola de medidas por el Parlamento, dijeron fuentes de la zona euro, y la canciller alemana, Angela Merkel, aseguró que pedirá al Parlamento en Berlín que autorice la apertura de negociaciones para el préstamo si las medidas son consideradas satisfactorias.
Merkel dejó claro en una conferencia de prensa a medianoche que "no soy exageradamente optimista" ante la perspectiva de hallar un acuerdo para el domingo que salve a Grecia.
Fuentes de la zona euro afirmaron que una cuestión clave es si el paquete de reformas griego será más ambicioso que los recortes de gastos, subidas de impuestos y modestas reformas que los votantes rechazaron el domingo en un referendo sobre un plan de rescate anterior.
"Los números deben cuadrar y estos se han vuelto mucho más desfavorables desde que los bancos cerraron y la economía se congeló en los 10 últimos días", comentó un funcionario financiero de la zona euro.