El primer ministro Papandreou tuvo una conversación telefónica con Strauss-Khan "en la que presentó el mensaje del gobierno griego sobre el comportamiento inaceptable de representantes de la Comisión Europea, del Banco Central Europeo y el FMI durante una conferencia de prensa ayer".
Atenas. El primer ministro griego, George Papandreou, se quejó el sábado ante el jefe del Fondo Monetario Internacional, Dominique Strauss-Kahn, diciendo que el comportamiento de los inspectores del FMI que monitorean un rescate de miles de millones de euros es "inaceptable".
En un inusual y duro ataque contra los prestamistas internacionales que salvaron a Grecia de la bancarrota el año pasado, el gobierno de Atenas les pidió que dejaran de interferir en sus asuntos. Sin embargo, lo hizo después de que la prensa griega lo atacara por no reaccionar ante las críticas de los funcionarios internacionales, quienes pidieron acciones más rápidas y drásticas para impulsar la economía del país.
Inspectores de la UE y el FMI que supervisan el plan de rescate a Grecia dieron el viernes la luz verde para que el país reciba más ayuda, pero adoptaron un tono más crítico que en visitas previas.
Papandreou tuvo una conversación telefónica con Strauss-Khan "en la que presentó el mensaje del gobierno griego sobre el comportamiento inaceptable de representantes de la Comisión Europea, del Banco Central Europeo y el FMI durante una conferencia de prensa ayer", dijo el despacho del primer ministro en un comunicado.
El gobierno emitió el comunicado tras recibir fuertes críticas de la prensa local por no reaccionar a los ataques de los inspectores contra ciertos sectores por realizar repetidas huelgas y ante el llamado a las autoridades griegas para que aceleren el ritmo de las privatizaciones.
"Pedimos que nadie interfiera en nuestros asuntos domésticos", dijo en un comunicado previo el portavoz del gobierno, George Petalotis.
Los inspectores visitaron Atenas para monitorear el progreso del plan de consolidación fiscal de 110.000 millones de euros (US$149.119 millones). Elogiaron a Grecia por estar en vereda para la aplicación de reformas y aprobaron una cuota de ayuda de 15.000 millones de euros (US$20.334 millones).
Pero, en referencia a grupos que se oponen a los planes de abrir profesiones altamente reguladas, el jefe de la misión del FMI, Poul Thomsen, dijo: "Algunos grupos que están en las calles, conductores de camiones, farmacéuticos (...) Se esconden tras privilegios que les permiten conseguir altos precios, e imponen una gran carga al resto de la sociedad".
Farmacéuticos, conductores de autobuses y médicos han estado realizando huelgas por semanas debido a las reformas de sus profesiones, creando enormes embotellamientos de tránsito en el centro de Atenas.
En otro signo de tensión por la cooperación con el FMI y los socios de la zona euro de Grecia, que permitieron al país evitar la cesación de pagos, pero impusieron impopulares recortes de salarios públicos y subas de impuestos, un ministro criticó los pedidos de la UE-FMI de más privatizaciones.
Los prestamistas pusieron una ambiciosa meta de ingresos por privatizaciones, y dijeron el viernes que se recaudarían 50.000 millones de euros (US$67.781 millones) en el periodo 2011-2015.
La meta previa del gobierno era por 7.000 millones de euros (US$9.489 millones) en el periodo 2011-2013.