Pese a que se planteó como una instancia prioritaria, el Ministerio de Agricultura, Ganadería y Alimentación cuenta con una asignación de US$ 221.5 millones, de los cuales 94% serán utilizados para funcionamiento, y 6% en inversión.
Ciudad de Guatemala. De los casi US$ 7.500 millones que el Gobierno tiene planificado gastar el próximo año, solo el 21,3% se utilizará en inversiones, ya que un 14% será para pago de la deuda pública, y el restante 64,7%, para funcionamiento que incluye gastos de personal y administrativos.
Lo destinado a inversión es 2,1 puntos porcentuales menos que este año, cuando representaba el 23,4%, con US$ 1.601 millones, mientras que para funcionamiento se dedicó el 60,5%.
Según el decreto aprobado por el Congreso, de los US$ 562 millones que le fueron asignados al Ministerio de Salud Pública y Asistencia Social, 95% por ciento se destinará a funcionamiento, y sólo 5% para invertir en nuevas instalaciones sanitarias.
Pese a que se planteó como una instancia prioritaria, el Ministerio de Agricultura, Ganadería y Alimentación cuenta con una asignación de US$ 221.5 millones, de los cuales 94% serán utilizados para funcionamiento, y 6% en inversión.
Otro ministerio que tiene baja asignación para invertir es el de Educación, con una cifra que duramente roza los US$ 10 millones —1%— que han sido destinados para ese rubro, mientras que el resto, quedan para administración y el pago de sueldos de más de 160 mil maestros y otros empleados del área administrativa.
Preocupación
Rubén Darío Narciso, economista de la Asociación de Investigación y Estudios Sociales, calificó de “normal” que el Estado destine más recursos para funcionamiento, en especial en ministerios como Educación, Salud y Gobernación, donde la mayoría de los fondos se usan en el pago de maestros, médicos y policías.
Sin embargo, el analista refirió que el país debe incrementar sus ingresos porque “se requiere de que haya más inversión en infraestructura vial, escuelas o centros de Salud, para atender las necesidades de la población en esas áreas.
Mynor Cabrera, economista y experto en finanzas del Instituto Centroamericano de Estudios Fiscales (Icefi), expuso que le preocupa la reducción que ha habido en inversión para el 2012 respecto de este año.
“Es cierto y normal que el Estado tenga que funcionar, pero el problema es que con estas asignaciones no se podrán cubrir las necesidades básicas de los guatemaltecos que requieren cambios en la infraestructura”, afirmó Cabrera.
El analista del Icefi también señaló que en los últimos años se ha visto un detrimento en la inversión, ya que para evitar el incremento del déficit fiscal se sacrificó la edificación y construcción de obra pública, por lo que “Guatemala tiene un gran rezago que se ha agravado más con el paso de tormentas como Ágatha y la 12-E”, explicó.
Menos para deuda
Otra de las modificaciones en el destino de los fondos para el 2012 se da en el servicio de la deuda, la cual este año tiene asignados US$ 1.102 millones, que representan 16,1% de los gastos.
Sin embargo, para el 2012 se destina 14%, con US$ 1.050 millones, US$ 91 millones menos que en el proyecto presentado por el Ministerio de Finanzas.