El alza en los precios al consumidor se mostró presionada especialmente por el alza en los costos de combustibles y otros productos energéticos, que registraron una inflación de 18,71%, la cifra más alta desde la segunda quincena de enero del 2003
Ciudad de México. A la primera quincena de agosto del 2018 la inflación alcanzó un nivel de 4,81%. El alza en los precios al consumidor se mostró presionada especialmente por el alza en los costos de combustibles y otros productos energéticos, que registraron una inflación de 18,71%, la cifra más alta desde la segunda quincena de enero del 2003 cuando alcanzo un encarecimiento de 20,07%.
Respecto de los últimos quince días de julio de este año, el Índice Nacional de Precios al Consumidor (INPC) registró un incremento de 0,34%, lo que representa la variación quincenal más alta en el periodo julio-agosto en 14 años.
El componente no subyacente del INPC fue el que tuvo la mayor incidencia en la inflación. Al interior de este, se registraron aumentos importantes de precios de los energéticos y las tarifas autorizadas por el gobierno (13,51%) y de productos agropecuarios (0,87%).
Con la nueva metodología utilizada para el cálculo de la inflación en México, los combustibles, las frutas y las verduras y algunas mercancías no alimenticias fueron las que tuvieron mayor peso en la ponderación del índice, por lo que el aumento de precios de éstas repercute de forma importante.
Entre otros aspectos, el Inegi (Instituto Nacional de Estadística y Geografía) comunicó que se realizaron algunas modificaciones en la metodología, entre ellas destacan cambios en la clasificación del gasto por objeto, ponderaciones otorgadas a cada genérico considerado, integración de nueve ciudades de referencia, clasificación por entidades, contempla 10 genéricos nuevos, 2 genéricos que desaparecen (llamadas de larga distancia y calentadores de agua) y algunos otros se desagregaron de manera distinta.
Subyacente presionado por los servicios educativos. En un año, los precios de las mercancías y servicios que integran al componente subyacente del INPC aumentaron 3,60%, resultado impulsado por el encarecimiento de la educación y de los alimentos procesados, bebidas y tabaco.
Los servicios de educación privada (colegiaturas) presentaron una inflación de 5,10%, el aumento más pronunciado de este rubro; las colegiaturas registraron el nivel de inflación más alto desde la segunda quincena de agosto del 2009, en la que se registró un nivel de 5,13%.
Los precios de alimentos procesados o preparados, bebidas y tabaco incrementaron 4,49% a la primera quincena de agosto en su comparación anual, las mercancías no alimenticias 3,32% y los servicios de vivienda 3,79%.