El Idesa, con base en datos oficiales del gobierno, mencionó que 6,8 millones de personas en Argentina, equivalente a 29% de una población economómicamente activa de casi 19 millones de personas, no trabajan ni buscan trabajo.
Buenos Aires. Dos de cada tres argentinos carece de un empleo protegido, según un informe difundido este lunes por el Instituto Argentino para el Desarrollo Social (Idesa).
"Todavía son mayoría las personas en edad de trabajar que tienen vedada la oportunidad de acceder a un empleo de calidad. Esta es la consecuencia de perseverar durante décadas con regulaciones laborales que desalientan la generación de empleos", señaló la entidad.
El Idesa, con base en datos oficiales del gobierno, mencionó que 6,8 millones de personas en Argentina, equivalente a 29% de una población economómicamente activa de casi 19 millones de personas, no trabajan ni buscan trabajo.
En tanto, 1,1 millones de personas (5%) busca trabajo pero no lo consigue, o se integra al segmento de desocupados, mientras que 7,9 millones (33%) trabaja como asalariado no registrado o en el cuentapropismo, es decir, empleos donde los derechos laborales no se hacen efectivos.
"Sólo una minoría de las personas en edad de trabajar accede a un empleo protegido por las normas laborales. Prácticamente un tercio no participa del mercado de trabajo o está desempleado. Otro tercio trabaja, pero bajo condiciones precarias como es el empleo asalariado no registrado o en el cuentapropismo", indicó el Idesa.
Dos de cada tres personas en edad de trabajar no tienen acceso a un empleo asalariado registrado en Argentina, reiteró.
"La contradicción es muy visible. La legislación laboral se compone por una compleja acumulación de normas que establecen reglas de protección al trabajador. Pero el corto alcance en su aplicación diluye considerablemente su impacto protectivo. Muy pocos trabajadores disfrutan integralmente de la protección legal", subrayó.
"La mayoría, sobre todos lo que están en mayor estado de vulnerabilidad, quedan excluidos debido a la alta incidencia de la inactividad laboral, el desempleo y la informalidad", añadió.
De 2003 a 2013 Argentina disfrutó un inédito ciclo de creación de más de tres millones de empleos formales, pero las regulaciones laborales no experimentaron cambios importantes y aún así quedan dos tercios de la población en edad de trabajar excluidas de este tipo de empleo, indicó la entidad.
"En lugar de perseverar en viejas recetas, como apelar a devaluaciones o tibias reducciones de contribuciones patronales, la reivindicación del trabajo como vía para concretar la justicia social exige un cambio de paradigma y, derivado de ello, un replanteo integral hacia la modernización de las instituciones laborales", afirmó.
El informe dado a conocer este lunes coincidió con un reporte de la Comisión Económica para América Latina y el Caribe (CEPAL) que alertó desde Lima, Perú, que la región enfrenta una "encrucijada" producto de las restricciones externas y problemas endógenos que limitan el desarrollo futuro.
La CEPAL presentó el documento "Pactos para la igualdad: hacia un futuro sostenible", durante su 35 periodo de sesiones que se extiende hasta el próximo viernes en Perú.